Anubis y Alaric -Te atrapé-

Anubis no dijo nada más. Estaba cabreada con ella misma, pero no podía demostrarlo hasta el último momento, así sería... así debía ser. El lider llegaría, ella ya no podría escapar, ahora debía pasar a otro tipo de plan, ella no sería un hueso fácil de roer.

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-No...-Dijo suave y entonces se aferró a su brazo ¡Él era su novio!-Seré una buena novia.-Le dijo con una sonrisa, entrelazando sus dedos, sabía que Claus no era tan expresivo pero no por ello lo dejaría, ella lo haría cambiar, estaba segura de eso, además Claus la quería, sería más fácil, ya no seria un amor unilateral.

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Sus ojos azules miraron a la nada, sentía el viento recorrer su cuerpo delgado y curvilineo sin exagerar, sus dedos se erizaron y sus pupilas se iluminaron en un azul más intenso, como si el sol los hubiera tocado directamente. En ese momento todo se lleno de agua, incluso ella parecía estar sumergida en una enorme lagunas, sin embargo ella podía respirar, podía incluso sentir aun el viento del lugar donde vivían, eran solo ilusiones, fantasías creadas por los ancianos. Su ropa se desintegro poco a poco, dejandola desnuda y con los pezones rosados en punta por el frio del clima. La marca en su muslo apenas y se podia ver, Frejya ya no llevaba el collar... sería lo primero que notarían, tendría que explicarlo.

Alaric omo asiento unos segundos y entonces poco a poco se convirtió una vez más en ese apuesto chico, manteniendose unido a la hechicera aun con la esposa aunque ahora de su muñeca.- Regreso antes de lo esperado.- Dijo sin mirarla, deseando salir de aquella jaula para recibirlo, no percibía a su madre pero ¿y si ella les estaba jugando una broma como de costumbre? Trago he hizo puños sus manos, faltaba poco.

-(-)-

Anke entonces se preocupo ¡Frejya no estaba! ¿Cuando diablois se había desaparecido? ¿Como? ¿En qué jodido momento? ¿Cómo es que no se dieron cuenta? Se apresuro a salir para avisar a Raynar y Günter pero era demasiado tarde, ellos ya recibían a Cys con l respeto que le tenían inclinandose levemente. Tensó la quijada, Cys no estaría anda feliz.

-Tenemos que movernos rápido, necesito que nos reunamos, por favor.- dihco eso Cys se apresuro a donde la casa, mirando a Anke en la entrada, sonrió un poco de lado, quería ver a Frejyam necesitaba asegurarse de que estaba bien antes de partir, porque de nuevo la dejaría con Anke para cumplir con lo que Branko pretendía, tenían poco tiempo para prepararse para ese extraño y despreciable juego.

-Cys.- Lo detuvo Raynard.- Alguien intento...- No temrino de hablar cuando Cys se giaba lentamente para verlo y así sólo asentir con la cabeza.- Alaric se encarga de vigilarla. Claus ahora fue al orfanato y bueno, estas aquí, ella intento robar información de la habitación de Al.

Cys entonce smiraba a su primo y después la casa, quería bsucar a Frejya primero ¡ A la mierda la intrusa pero... Funió el ceño.- ¿Donde está?- Anke tenía que dar explicaciones.

-(-)-

-Bien- Fue su unica respuesta y cuando Lucia le sujeto de la mano no hizo más que cargarla como a una princesa.- NEcesito apresurarme, mi familia me necesita.- Dicho eso comenzó a correr, dejaría a Lucia, vería pronto Magali y regresaría para escuchar las noticias que Cys había traido para ellos, le impacientaba,s e trataba de su madre después de todo.

Los cabellos rubios del hada flotaba como si no existiera la gravedad en aquel lugar. Seguía sumergida en aquella agua creada por las ilusiones de los ancianos, seres poderosos, aquellos que mantenían el equilibrio y la armonía de su pueblo mágico, un pueblo al que no había visto en mucho tiempo, tanto tiempo que no recordaba ya... sin embargo aun podía percibir el viento calido de su antiguo hogar, del que solo tenía esbozos en su cabeza, porque los ancianos se la habían llevado desde muy pequeña, luego de la desaparición de sus padres y de su hermano.

-Teacht níos gaire , ba mhaith liom a fheiceáil ...-Susurró una voz angelical, era la voz de una mujer la que la llamaba. Frejya caminó poco a poco, mirando como todo a su alrededor florecía por cada pisada que ella daba, esa era la manera de saber que estaba siendo aprobada, que tal vez no se habían dado cuenta de nada, que no sabían de Cys ni de Lea ni de los niños ni Alaric o Anke o Raynard... esperaba que tampoco supieran de Dimitri.

-Ard...-Frejya se detuvo ante el llamado de una segunda voz.-Teacht níos gaire , ba mhaith liom a fheiceáil ...[¿Donde esta tu collar?] ... Frejya.

-Lo he guardado en un lugar seguro.

-¿Porque hablas el idioma de los humanos?-Otra tercera voz, más empatica que la anterior pareció sorprenderse.

-No somos seres que juzguen...-Dijo ella armandose de valor, mirando de reojo a su alrededor, era imposible que alguien entrar a aquel lugar a excepción de alguien quien tuviera sangre nimfeach "sangre de hada" o un objeto de su pueblo, como el collar por ejemplo.-Ademas he venido aquí para aprender el habla humana, no tiene nada de malo.

-
Ní raibh muid ag teacht chun a mheas, mo nimfeach [No hemos venido aquí con el objeto de juzgarte, mi ninfa]

-Mo Banríona [Mi reina]-Respondió Frejya de inmediato, hablando con aquella voz angelicale que le había llamado primero. Su voz era como un canto suave que pocos tenían el placer de oir.-Tá do chorp rath agus bláth mar Buinneán ar an gcéad lá an earraigh [Tu cuerpo ha florecido como un retoño en la mañana del primer día de primavera] Mo Frejya.... mo sweet dolag... [Mi dulce muñeca]- Las flores en el suelo se agitaron y en una exploción de energía estas florecieron y rodearon el cuerpo de Frejya, sus ojos azules se fijaron en una silueta que aparecía de la nada, caminando suavemente con su largo cabello platinado, arrastrando una tunica azul creada por ceda de la más fina calidad. Parecía que volaba.-¿Te ha costado adaptarte a este mundo?

-No mi reina-Respondió la rubia levantando su mentón para verla mejor, la reina era alta, más que ella por lo menos y también muy hermosa, ella ya era un hada completa, llena de magia, desprendía luz casi por todas partes. Se decía que las hadas se habían creado de la luz que desprendía la diosa Era, madre de la naturaleza, ellos en pocas palabras eran seres que provenían de los dioses.

-La reina no tiene porque rebajarse al dialecto del hombre...

-No me rebajo Colosos...-El hada sonrió con delicadeza mientras la segunda voz tomaba la forma de un hombre mucho más alto que la reina, con ropas verde arbol, igual de largas y suaves, su cabello era largo y sus orejas puntiagudas, tenía algunas ligeras arrugas que delataban su madurez pero pese a eso era muy atractivo, sus cabellos eran gris claro y sus ojos del color de la miel recien descubierta.

-Su olor ha cambiado.-Dijo la tercera voz empatica, otro hombre mucho más joven que el anterior, un poco más bajo y con los cabellos verde lima.-¿Que le ha pasado a tu cuello?-Preguntó extrañado a la vez que la reina levantaba el mentón de la ninfa hacia ella.

-Vampire...-Susurró aquella hermosa mujer, soltandola de inmediato mientras las flores se alejaban de Frejya y ella caía al suelo apenada, tapandose la marca de los colmillos de Cys.-Cé go bhfuil do muince? [Quien tiene tu collar?]

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Anubis miró a Alaric. La necesidad de ir con aquel hombre para que? Probablemente para saber algo de sus seres queridos. Ser querido... era muy extraño para ella. Lo único que realmente le importaba era la familia Yasikov, la felicidad de cada uno de sus miembros, sobretodo de Narkissa.

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--¡C-Claus!-Se sorprendió por como la trataba, por como hacia aquello.-¡E-Espera!-Cerró los ojos, ella solo era una humana, no sabía que tan rápido corrían los lycantropos aun en su forma de humano. Pero estaba tan feliz que era lo que menos le importaba.... realmente estaba enamorada.

-Cys.- Lo llamo de nuevo el mayor de los cinco, Raynar mantuvo una expresión sería, no era cualquier cosa, se trataba de su familia ¡Joder! se trataba de su madre y queria explicaciones en ese instante. Tuvo como respuesta un chasqueo de la lengua de Cys acompañado de un ligero gruñido. Asintió con la cabeza.

-Vayan dentro, esperaremos a que Claus regrese y Anke, asegurate de que Frejya este con ustedes en la sala, ire por Al- Dicho eso les dio la espalda a todos para ir donde Alaric. No persibía del todo a Frejya y lo estaba inquitando, temía lo peor ¡En ese momento sólo podía pensar lo peor! No quería que Frejya desapareciera como su hijo y su tía. Avanzaba dirigiendose donde las celdas, el corazón se le aceleraba, era más bien un inmenso miedo por no sentirla con él cuando había regresado a su hogar, donde ya habían pasado un sin fin de buenos momentos.

Anke espero a que sus hermanso se acercaran, al igual que los gemelos.- Tenemos problemas, ella no esta aquí.- Dicho eso todos se pusieron en acción, bsucarían por toda la casa, en las habitaciones y demás en lo que Cys volvía con con Al y Claus.

-(-)-

Alaric mantenía la mirada en la entrada de la celda. se acerco un poco a la hechicera y sonrió, su líder se acercaba, trago y la miro de reojo.- No te preocupes, no te pasara nada.- le prometió cuando escucho que la puerta se abría, ahi estaba él y justo cuando sus mirada se encontraron Cys no hizo más que golpear el metal que los separaba.

-¿Qué hace....- Suspiro y negó con la cabeza ¿Por qué una Yasikov había intentado...- ¿Oleg sabe qué estas aquí?- Cuestiono a la chica mientras abría el cancel y se acercaba para liberalos de las esposas.

-¿Qué haces?- Cuestiono el rojo queriendo alejar a la chica de su primo.

-Ella es nuestra aliada, no podemos tenerla aquí.

-(-)-

-Sujetate fuerte.- Le pidió y comenzaba a correr, la protegería de cualquier cosa pero necesitaba apresurarse, tenía que regresar, las noticias sobre su madre eran aun más importante que estar junto a Lucia pero nunca más importante que estar junto a Magali. Llego en cuestión de segundos pues ya regresaba al piso a la humana.

-Busca a Magali, la llevare conmigo. Regresare en un par de horas.

(Me tardo con el traductor así que lo que este en asterisco es el idioma de ellos XD LOL)

Frejya no contestó, seguía en el suelo, desnuda en cuerpo y también en alma, la reina se había dado cuenta... un vampiro había bebido de ella.

-*Contesta*-Le pidio la reina quien la miraba desde lo alto. Frejya era una de las hadas más importantes de su pueblo, si no la más importante despues de ella. En su linea de vida se encontraba escrito el futuro de su pueblo y también el de los humanos. Era por ello la importancia de mantenerla alejada de cualquier cosa que pudiera alterar su estado de pureza, pero era claro que no habían podido lograrlo, el final se acercaba más rápido de lo que penaba.-*¿Le has dado tu collar al vampiro?*

-Su nombre es Cys.-Respondió con firmeza, apartando los cabellos rubios que cubrían su rostro, levantandose poco a poco retomando su coraje.-No vampiro.-Su mentón tembló-Su nombre es Cys Jaeger... y yo lo he elegido como mi lazo.

La voz de los ancianos fue un suspiro de indignación, Colosos y Mabon se miraron entre sí sin saber que decir. La reina por su parte tan solo miraba a la ninfa, podía sentir una fuerza nueva fluyendo en ella. No mentía, ese tal Cys el vampiro era el lazo que su hada favorita había elegido.

-*Que insolencia, tener un lazo que no lleva consigo el nimfeach*

-Athair Colosos.... -Susurró Frejya herida ante las palabras del hombre más longevo. Él siempre la había querido y cuidado como una hija,siempre estricto y sabio.-Él es mi vida.-Susurró ella bajando la cabeza ante los ojos frios de su reina y los confusos de Mabon.

-*Estas desnuda en cuerpo y en espiritu ante mis ojos Frejya... él no sabe lo que eres*-La reina miró a su alrededor.-*Él viene en camino*

-¡*Que locura!*-Vociferó Colosos.

-Es imposible que entré, no sin el Nimfeach...-Mabon se detuvo un instante y luego volvió sus ojos a la pequeña ninfa.-*Él tiene el collar...*-Susurró

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Mo Ghrá [Amor mio]


El día que te conocí supe que había algo diferente en ti. En el poco tiempo que tengo de vida jamás había sentido la necesidad de mantenerme al lado de alguien como lo he sentido contigo. Aun así la separación es inevitable.
Quería estar para verte llegar, tengo miedo de perderte... por favor no te lastimes. Eres valioso para mi, más que cualquier otra cosa. Pero tengo que ir, ellos me llaman, necesitan saber que estoy bien, tengo que regresar. Tal vez pasen algunos soles sin tenerte junto a mi, pero el tiempo es apenas una brisa de verano para nosotros. Siempre estaré a tu lado para mostrarte el camino a casa, mantenme cerca hasta que regrese porque tu eres mi lazo y estaré unida a ti hasta el final de mis días.


~

++

Lucía apenas y pudo parpadear. Estaba ya en la pensión con el lycan mirandola a los ojos.


-C-Claro...-DIjo mirando de reojo el lugar, casí podía sentir la emoción de Magali, aunque no había sido más que un simple resfriado, ella necesitaba una excusa para poder ver a Claus. Despues de todo habia funcionado, ahora eran novios.-V-Volveré ... es decir, creo que debemos entrar. Magali esta en cama-Mordió sus labios ¡Claus era su novio!

Las acciones de Cys fueron muy rápidas. Tenía la necesidad de deshacerse de todos para estar a solas con Frejya porque ¡Joder! en verdad la necesitaba, ya habían pasado muchos días y no estar a su lado lo irritaba, además se sentía muy mal, había perdido mucha sangre en combates quizá innecesarios, pero todo era pos su hijo y por darle al Orendain la información que quería.

Ordeno a Alaric que le dejara a solas con Anubis. Al, a regañadientes acepto y se fue del lugar no sin antes dar una ultima mirada a esa hechicera. Había funcido ligeramente el ceño y los dejo al fin solos. Cys por su parte no dio mucho a la hechicera y no espero explicaciones, simplemente le pidio que se fuera directo donde Oleg y explicara con exactitud lo que había pasado porque estaba cien por ciento seguro que si ella estaba en aquel lugar tras reja era porque había hecho algo realmente malo para los cinco. La dejo ir sin ningun problema y se apresuro para encontrarse con los demás.

Sobre los gemelos no hizo más que pedirles que continuaran protegiendo los alrededores, en especial el orfanato junto con Claus a quien tendrían que llevarle un mensaje ya que no se daría el tiempo para ir a buscarlo, Frejya no estaba en la casa y eso lo hizo enojar demasiado ¿Cómo diablos habían permitido que ella desapareciera de la nada?

Le ordeno a todos, sin ecepción que viajaran a Italia, al menos cuatro de ellos estarían en el juego o algo así había explicado Branko pero bueno, después de casi tener una fuerte pelea con Raynard todos optaron por obedecer ya que querían de regreso a su madre sana y salva.

Listo, todos se habían ido después de preparar una pequeña maleta. Raynerd aun se quejaba pero era Anke quien con una gran emoción salia empujando suavemente a su hermano, aunque sabía que podía ser peligroso era la primera vez que salía de esa gran mansión y de la hermosa Alemania.

Cys ya estaba buscando en la casa, no se iría sin revisar de nuevo porque conocía a Frejya lo suficiente y sabía que ella no se iría asi como así. Fue a las habitaciones en las que más pasaba el tiempo. Primero su habitación, después la cocina y po último la habitación del paino. Tenía el ceño fruncido, estaba asutado, muy preocupado por ella. No quería pensar lo peor, pero todo le hacía pensar cosas malas.

-¡Joder!- maldijo mientras se acercaba al piano y se snetaba en el banquillo.- ¡Diablos Frejya ¿Donde estás?!- golpeo con suavidad el piano y justo cuando escucho el movimiento de las cuerdas noto alo extraño sobre la tapadera que cubría las teclas. Frunció un poco el ceño y la abrió. Ahi estaba lo que tanto estaba buscando. Abrió el sobre y no sólo se encontro con sus letras, también con ese precioso collar que ella tanto protegía. Paso sus ojos a la carta y comenzó a leer.

Por un momento sintió que todo lo que lo rodeaba desaparecía. Sólo estaba él y ella susurrando a su oido todas esas palabras. Parecía un adiós o quizá una promesa en la que se verian de nuevo pero ¿Cuando? ¡No! se alarmo y guardo esa carga en su bolso mientras ponía en su cuello aquel collar. No, no estaba dispuesto a perderla, a ella no. No pensó más, ella había regresado a su casa, no había duda de eso. apenas el collar estaba sobre su pecho se preparo.- También eres valiosa para mi, Frejya, tanto que no estoy dispuesto a perderte.- Y dicho eso salió a toda velocidad de aquella enorme mansión, todo estaba preparado, si por esa acción arruinaba los planes del Orendain no le importaba porque por sobre todo estaba la mujer que estaba destinada para él, su imprimación o en sus palabras, su lazo.

-(-)-

Claus iba a pedirle que se apresurara, tenía que encontrarse con sus hermanos, con Cys y escuchar que su madre estaba bien pero ¡Joder! Ahí estaban los gemelos ¿Qué carajo? -Yo te alcanzare en un segundo Lucia, acompaña a Magali....-Dijo sin mirarla y salió del orfanato para encontrarse con los gemelos, no le gustaría anda lo que escucharía.

Cabello y ojos color negro, su tez era demaciado clara para ser un lycantropo común y corriente, a decir verdad Cys tenía rasgos mucho más elegantes que un lycantropo pura sangre. Cys era un mestizo, un hibrido ¿de que? "Es mitada vampiro" Por dentro Anubis completo el crucigrama de Carsten Jaeger. Ese niño venía del futuro, hijo de Frejya y Cys Jaeger había hecho travesuras para viajar al pasado y corromper el alma pura de su joven Narkissa.

Desagradable.

Y más desagradable aun fue ver a Alaric mirarla, verlo marcharse y saber que ese ser era el único uqe podía leerla por completo, él la podía descifrar "Es un peliro potencial" Pensó cuando fue liberada, manteniendose callada y mirando al lider Jaeger con desconfianza y frialdad. Sintió la esencia de los demás Jaeger desparecer y tambien como aquella hada ya no estaba, ¿que pasaría entre ellos? ¿Cual eera su historia? ¿Que poderes albergaba Carsten? ¿Que tan peligroso era para Narkissa?... Que tan peligroso era Alaric para ella.

Anubis salió de la selda con todo el paso firme que podía, no bajaba el mentón ni mucho menos la mirada. Estaba llegando a la salida cuando lo sintió, la esencia de Alaric, su horrible presencia. Se giró a verlo por un instante, era su objetivo, ella lo mataría en cuanto tuviera oportunidad. El único ser que podía descifrarla debía morir, era peligroso, era riesgoso... ella no podía dejarlo con vida.


+++

Frejya se agitó, abriendo los ojos de par en par ante la expreción de su reina. ¿Cys venía? ¿Cys iba a buscarla?

-*Sabes lo que significa tener un lazo*-La reina reforzó la magia alrededor de ellos.-*Un lazo significa vida y también luz. Tu lazo debería ser luz y no obscuridad, ¿has olvidado las reglas?*

-Enamorarse de alguien que ha perdido la luz es peligroso.-Respodió Mabon que miraba de reoj a Colosos.-*Sera un problema para la Reunión, Frejya... es un Vampiro*-Le dijo casi recalcandolo.

-Sabes lo que pensamos de los vampiros, sabes que ellos no deberian siquiera mirarnos.-Colosos se acercó a la ninfa que aguantaba el llanto, sabía todo eso, él mismo se lo había enseñado a ella. La sangre de las hadas era adictiva para los vampiros, si un hada caía en sus manos no tardaría en desangrarla, se la comería. No eran animales ni humanos, los vampiros eran serés sin dueño, producto de algo desconocido y misterioso.-*Mi hada...*

-Por favor...-Suplicó Frejya.-No me lo quiten...-Tomó las manos de Colosos quien se había acercado a su cuerpo. Frejya lloró.-P-Puedo sentirlo...-SUs orbes azules miraron al hada más anciana en apariencia.-Q-Quieres quitarme el lazo que me une a él.

-Tu eres luz... la obscuridad tarde o temprano te va a apagar. Él no tiene la misma sangre que nosotros.-Colosos negó, Frejya lloraba, sus lagrimas caían gota tras gota en sus mejillas silenciosas.

-Por favor...-Pidió de nuevo. La reina y Mabon lo miraban en silencio. Colosos tenía el poder increible de borrar esencias. Las esencias y fragancias eran para las hadas lo más importante, era lo que traía los recuerdos, nada era más importante que la esencia para una hada, incluso más que las memorias. Sin la esencia las memorias perdían significado.-N-No lo hagas...

-*Parece que tenemos un invitado*-La reina quien no había bajado la mirada, observó fijamente un punto detrás de Frejya. El vampiro estaba allí usando el collar de Frejya. Casi suavizó la expresión, el vampiro podría entrar al espacio-tiempo en donde estaban, entraría a su burbuja de mágia particular.

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-C-Claro...-Magali miró a los chicos, apenas podía verlos en la sombra ¿quienes eran?

-¿Lucía? -La chica se giró para ver a Will.-¿Que haces afuera? Pensé que estabas con Mag.

-Eh... yo, le he dicho a Ana que buscaría Claus, la niña...-se pusó nerviosa.-es decir, Magali responde mejor con Claus cerca.-Avanzó dentro de la casa, mirando de reojo a donde Claus había caminado. Su novio era tan atractivo.

-¿Porque sonries?-Preguntó Will levantando una ceja y cruzando los brazos.

-Yo er.... iré por Magali.-La chica había entrado corriendo dentro de casa, saltando escalón por escalón hasta perderse de la vista de un confundido Will. Era como flotar en el aire. Aun no podía creerlo, ¡Ella tenía novio! ¡Y uno como Claus nada menos!

-¿Sucede algo? ¿Viene Claus contigo?

-Ana.. no...-Se trabó.-Es decir, no sucede nada y Claus viene conmigo, solo que se quedó un momento fuera.-Reaccionó, debería pensar más en Magali y no en Claus, despues de todo la niña estaba enferma.-¿Como sigue ella?

-Le ha bajado la fiebre, esta mejor.-Suspiró.-fue una falsa alarma, pero será mejor que llamemos al médico, los remidos caseros no siempre ganan las batallas.


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Alaric tenía el ceño un tanto fruncido mientras avanzaba con sus hermanos. No le había gustado para nada la desición que había tomado Cys. Iría por esa hechicera porque en ningun momento había respondido sus preguntas, al menos la más importante. La buscaría y la interrogaría de nuevo, hasta obtener sus respuestas y... no sabía que más pero tendría todo de esa maldita hechicera.

-(-)-

Cys había corrido a velocidad, había recorrido entero hasta la casa de la ninfa, justo en aquel lugar donde seacerco a ella y así, de rodillas se miraron el uno al otro por largo tiempo, disfrutando su cercanía. Esa había sido la segunda vez que le miraba. Recordo como no pudo resistirlo, como algo dentro de sí le ordenaba que fuera a buscafrla, necesitaba no sólo alimentarse de ella, era su sola presencia que lo hacía sentir en plenitud, le daba una paz que evito y espero jamas encontrar pero, como de costumbre, las cosas jamas salían como él lo planeaba pero, comenzaba a costumbrarse a todo cuanto Frejya provocaba en él y lo que lo rodeaba.

continuo avanzando percatandose del todo de la poderosa magía que rodeaba el lugar para protegerlos, ciertamente el collar lo ayudaba, podía atravesar las barreras que seguramente de no llevar el objeto de Frejya jamas hubiera sentido, jamas ubiera descubierto. Era un lobo después de todo, o al menos una parte de él, por lo lano la magía no era su fuerte.

Detuvo sus pasos justo cuando escucho el solloso de Frejya, estaba entre arbustos y enormes y poderosos árboles. No percibio el poder de los seres que rodeaban a la ninfa, sólo la vio a ella desnuda, rodeada de un par de ancianos y otra mujer. Frunció el ceño, inclusive gruño furioso ¿Le habían hecho daño? Sus colmillos se asomaban y sus garras inclusive sepreparaban para el ataque, le habían hecho daño ¡¿Le habían hecho daño?! Comenzó a avanzar para salir desde los arbustos caminando directamente hacía ellos mientras que llevaba su mano detrás de su espalda para desenfundar a Sören.

-(-)-

Claus recibió el mensaje completo por parte de los gemelos.Estuvo apunto de ir por sus hermanos ¡¿Llevarse a Anke?! No, eso le preocupo y bunoe, también el hecho de que Cys no había dicho nada de su madre. Los gemelos le detuvieron y fueron simples sus palabras

"Cys ordeno que te quedaras aquí, estaras a cargo de todos nosotros, en especial del orfanato. Confiaba bastante en ti verde"

Después de una breve pausa Claus no tuvo de otra más que aceptar y pedrile a los gemelos que se mantuvieran al tanto por si los necesitaba o viceversa, deberían estar en cosntante contacto. Los despidió y en seguida fue donde el orfanato para ver a Magali aunque no estaba tranquilo, podía notarse en su ceño fruncido.

Los ojos de los dos hombres brillaron en un blanco ligero, la presencia de un vampiro no les gustaba, mucho menos saber que él había bebido de Frejya, que se atrevía a mostrar esa esencia tan salvaje frente su reina, ¡Frente a la niña de la profesía!

-C-Cys!-Gritó Frejya, girandose mientras intentaba correr a su lado.

-*Atrás, ninfa*-Colosos la colocó detrás suyo, mirando con desprecio al hibrido que no tenía el Nimfeach.

-No lo hagas... Colosos te lo ruego*-Habló en su idioma natal, queriendo ir con Cys pero siendo impedida por la autoridad que tenía Colocos, Mabon y sobretodo la reina sobre ella.

-No des un paso más a las tierras santas.-Colosos dio un paso, ligero, como si flotara-Te atreviste a morder a una hija de nuestro Pueblo.-Abrió la mano y en ella apareció un baculo verde, torcido en espiral cerca de la punta, amarrando en ella una piedra ultravioleta que empezaba a brillar.-Jamás debiste acercarte a ella..-El hombre de cabellos largos y mirada petrea abrió sus brazos emitiendo una gran energía.

-¡No!-Frejya intentó correr, pero Mabon la había tomado de ambos brazos, reteniendola a su lado.-¡Colosos no le lastimes!-Lloró.-¡CYS!-Si Cys disparaba Colosos regresaría su ataque con la intensidad de la fuerza de voluntad que Cys tuviera, ella debía protegerlo ¡Debía protegerlo!

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-Estabamos esperandote.-Le dijo Will cuando lo dejo entrar. Se encogió de hombros, aun existía una ligera diferencia por lo que había pasado hacia algun tiempo, superaba poco a poco saber que Frejya no era para él.-Estan en el piso de...-Suspiró y se giró enfadado al ver como Claus se dirigía a donde Magali sin preguntr. Olvidaba que eran lobos y todo lo podían deducir con su "perruno olfato"

Magali por su parte miraba las estrellas brillantes que habían pegado en el techo de su habitación. Su fiebre había disminuido sin embargo tenía los mofletes rojos al igual que los ojos ligeramente irritados, era una "humana" después de todo.-Mami...-La niña apretó su boquita, a veces extrañaba a su mami, pero ella no la quería por su marca en la mejilla, por no ser bonita. Pero aun así ella si quería a su mami, su mami era buena, le daba de comer y a veces la abrazaba para que dejara de llorar, le daba medicina para cuando estaba enferma. Su mamá no era mala. Cerró sus ojos cansada. Extrañaba a Claus.

Cys mostro sus colmillos mientras que con Sören amenazo a ese que se acercaba a él ¿Qué no debía acercarse a ella? Ciertamente lo había pensando tiempo atrás, alejarse de ella, no crear un lazo especial pero nada ni mcuho menos nadie iba a alejarle ahora que s había aferrado a ella de tal manera.

-*Tú no tomaras esa desición*- Dijo en un rudo aleman, era parte de su persona hablar en su idioma natal cuando estaba muy molesto. Cargo la pistola justo cuando apareció el baculo y en segudno movimiento desenfundo a Christa y apunto al otro que sujetaba a su ninfa ¡SU ninfa! No retrocedió pese a la poderosa magía que los rodeaba. No, eso no iba a intimidarlo de ninguna manera, se trataba de mantener a su imorimación a su lado, o bien, como ella lo dijo, su lazo.- *¡Sueltala!*- Ordeno avanzado sin bajar las armas. Cys no descargaba sin razón, al menos aun no la había o no del todo,e lla gritaba por él pero no suplicaba que le alejara del resto ¿Serían su familia? Afilo la mirada, comenzaba molestarse aun más, tanto que sus ojos oscuros se teñían de un precioso carmín.

-(-)-

Claus no era un chico malo, en realidad escuchaba con atención a cualquiera que le hablara dentro del orfanato pero en ese instante si que ignoro a Will, simplemente avanzó hasta llegar a la habitación de la pequeña. No busco a Lucia, ella no era su objetivo, en realidad nunca lo fue pero... Lo ignoro y entro a la habitación de Magali, mirandola recostada sobre su cama. Intento relajar un poco pero le costo. Se acerco a ella en silencio y se puso de pie a su lado.- Magali.- La llamo por su nombre, era su forma de saludar.

Colosos frunció el ceño, apenas y podía notarse lo enojado que estaba ¿Que la soltara? ¡Su pueblo!?

-No!-Elevó el tono de voz.-Tu sueltala, alejala de ese lazo que la condenará a su muerte...

-¡Basta!-Frejya se jaloneo, Mabon la sujetaba con fuerza pero tampoco quería lastimarla.-¡dejalo, Colosos... Colosos no lo lastimes!-Lloró, el anciano que la tomaba seguía siendo más fuerte que ella fisicamente, no podía simplemente quitarse asi como así, más aun, ella no podía usar su magia, le estaba prohibido, podría lastimarse, podria lastimarlos.... podrían encontrarla si lo usaba.


-¡Te exijo que la dejes!-Gritó Colosos con fuerza, lanzando la magia que desprendía de su cuerpo, Cys la recibiría de golpe, no tendría compación, le quitaría cada uno de los recuerdos con Frejya, cada sentimiento que ella despertaba, borraría la esencia de ella de él por completo, lo haría para salvar al hada, para no condenarla con un vampiro, con alguien que no era de los suyos.

-¡Colosos no lo hagas!-Gritó de pronto Mabón, corriendo hacia él para evitar lo inevitable. Fue entonces que Colosos desvió su propio ataque, girando su baculo con fuerza, saliendo despedido hacia atrás por la fuerza del poder que había logrado desviar. Frejya había usado su magia, la había usado para llegar con Cys pese a que lo tenía prohibido, había utilizado esa energía que ella tenía prohibida para interponerse entre Cys y la magia de Colosos.

-¡Eres una insensata!-Gritó el mayor de los ancianos mientras intentaba recuperar su postura de pie, si no hubiese logrado desviar aquel ataque, Frejya hubiese saido herida, tal vez... no quería ni pensarlo.-¡Pude haberte matado!

-¡Si lo matas a él me matas a mi!-Hipó, abrazado a Cys aun desnuda, aun en medio de aquella "agua" que los cubría.

-Frejya....-Susurró Mabon quien miraba con tristeza aquella escena, jamás había visto a la ninfa de esa manera, no con esa determinación y ese miedo de perder a alguien.

-Tá sé mianach, tá sé ar mo comhionannas vótaí ... Ní féidir leat a chur ar ceal ! [Él es mio, es mi lazo, ¡No puedes quitarmelo!] -Habló con las lagrimas de miedo que aun resbalaban hacia su boca.

+++

Magali se levantó de golpe o por lo menos lo intento, pues no tenía muchas fuerzas, estaba agotada, había tenido mucha fiebre en la mañana peor ya estaba mejor.

-Hola.-Parpadeó curiosa y sonrió enseñando uno de esos dientes flojos que estaban a punto de caersele.-¿Vienes a darme la medicina? -Preguntó con inocencia, contenta de verlo allí, queriendose levantar para poder verlo mejor.

Cys había mostrado sus preciosos y peligrosos caninos ante las amenazas, ante ese deseo de alejarla de él ¿Por qué? Estaba enfureciendo, tanto que así como pretendieron atacarlos el intento ir de frente, nunca retrocedía. No detono sus armas, pelearía con sus manos pero no todo salio como esperaba. Nunca lo fue desde que la conoció. Si, ese poder mágico podía desubicarlo pero no importaba, iba a vencerlo, porque no iban a separarle de ella ¡No!

-*Dije que NO*-Gruño con fuerza preparandose para ir contra aquel hombre de avanzada edad pero detuvo su andar cuando sintió como ella lo abrazba y se aferraba. Sintió como su ser por completo se estremecio. La miro fijamente y no dudo en levantar sus manos para sujetarla y mirar a los demás como el poderoso lycan y vampiro que era, uno que protegería con recelo a su tan esperada imprimación. No había entendido del todo sus palabras, no sabía tanto como ella pudo haber aprendido aleman pues por tanto timpo se alejo que había perdido su práctica.

-No dejare que me aparten de ti. No dejae que te alejen de mi. Eres mía Frejya...- Le susurro mientras la abarza.- ¡Ella mía!- Le grito a todos, a esa mujer y en especial a ese hombre que pretendía o más bien le ataco.

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En seguida la detuvo. No iba a dejar que se pusiera de pie cuando se miraba tan enferma.- No te levantes.- Ordeno y se alejo para buscar la medicina de la niña así como la pomada para su cicatris. Estaba intentando mantener más la calma, estaba con ella, le alegro hasta cierto punto por verla pero, aun se miraba debil, muy cansada. Eso lo molesto más.- ¿Estas comiendo bien, Magali?

-C-Cys...-Frejya se aferró a él, no quería dejarlo ir, no podía permitir que todo lo que habian hecho juntos se esfumaran, las risas, el orfanato, las lagrimas, el primer beso...

-Silencio.-Dijo la mujer, hablando el idioma que Cys entendía. Ella se había mantenido en completo silencio, observando como Colosos y Mabon actuaban. Eran celosos de Frejya, ambos de maneras distintas y ella estaba orgullosa de eso.-Deja de llorar, mi dulce ninfa.-Dijo levantando una mano ligeramente, emitiendo un puntito de luz que crecía y crecía hasta eliminar toda la ilusión de "agua" que había allí, apareciendo en una enorme habitacion con ventanas sin vidrios y ramas de arboles adornando los marcos, había una enorme fuente de agua enmedio del enorme salón y el techo en circular asendía sin nada que lo protegiera más que los rayos del sol, era una especie de templo con cristales de colores claros y tallados en el suelo de arboles y cellos distintos.

-Mi reina.-Mabon y Colosos disminuyeron su poder, este ultimo casi a regañadientes.

-Cys Jaeger....-La hermosa mujer de cabellos casi platinados sonrió con elegancia, moviendose en su ambiente como si formara parte de aquel lugar desde hacia mucho tiempo.-Dale tu gabardina a mi ninfa, podría enfermar.-Dijo mientras caminaba a la fuente, sentandose en la loza de piedra alrededor del agua.-Dejenme a solas con ellos.-Pidió.

-Lo que ordene, madame.-Colosos inclinó su cabeza y salio del lugar, pasando a un lado de CYs y Frejya sin voltear a verlos. Mabon le siguio de la misma manera, sonriendo solo ligeramente. Cuando la puerta enorme se cerro trás ellos, la mujer levanto la mirada a los chicos.

-Por favor, tomen asiento-Extendio una mano y ramas de arbol crecieron por debajo de la fuente, formando circulos de corteza para que ellos pudieran sentarse. Suavizó su expresión, podía ver el amor que él le profesaba a ella, aun era inmaduro y torpe, pero era inmenso, brillaba y eso le complacio y le asusto, uno de los dos moriría si las cosas no salían como debían salir, uno de los dos sufriría por haberse encontrado.

-Cys...-Frejya tomó la mano del lycan y la llevó a su mejilla, los ojos de ella estaban rojos por el llanto y tenía las mejillas rojas por el esfuerzo, sus  hebras rubias como el sol caían por su espalda, ya no flotaban como cuando estaban en el "agua"-¿Me recuerdas?-Preguntó aun asustada, temía qúe la magia de Colosos si hubiese tenido efecto en él.-¿Sabes quien soy?-Susurró.


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-Lo estoy-Dijo ella inocentemente.-Ana me ha dado leche y corne flakes...-lo dijo tal cual-me he comido también una manzana.-Arrugó su ceño, las manzanas no le gustaban mucho.-Pero la comida que como no me alcanza para mi cuerpo...-sonrió poquito.-creo que mi cuerpo quiere mas comida pero yo ya no quiero.-Le explico con sus propias palabras. Respiró cansadita por hablar tanto.-¿Voy a morirme?-Preguntó casi en un susurró.

El híbrido nunca apartó sus ojos de aquellos que les miraban fijamente. No podía bajar la guardia, temía el significado de solo descuidar un segundo a esa ninfa. Solo imaginarlo le hacía sentirse dentro de esa oscuridad de la que misma Frejya le saco. Se aferró tanto a ella como ella a él y continuó mostrando sus caninos a los ancianos. Escucho a la mujer hablar pero hizo caso omiso, miraba a Coloso con un inmenso desagrado, con el instinto de la bestia que muchas de las veces los controlaban pero no en ese momento, no cuando ella se mantenía a su lado.

Todo a su alrededor se movía, toda belleza natural, toda esa maravillosa magia surgía y él no;podía apreciarla, no cuando sus sentidos sólo pensaban <<No los pierdas de vista >> se decía una y otra vez, una y otra vez. Inclusive gruño con más fuerza cuando pasaron por su lado, acercando a Frejya tanto como pudo, mostrando lo posesivo que sería con ella, sin embargo, salió de ese trance justo cuando su mano ya percibía la suavidad de la mejilla de la rubia.

Sus ojos se desviaron a los de ella y noto el dolor, el esfuerzo que había hecho por estar junto a él y con ambas manos tomo las mejillas de su adorada ninfa.-...- Asintió con la cabeza y se inclinó lo suficiente para unir su frente con la de ella.- Mi Frejya... *Tú eres mi amada Frejya*- Le respondió. Se apartó un poco para comenzar a quitarse la gabardina. Ciertamente había notado su desnudes pero con la amenaza, sus celos y enojo lo había olvidado por completo.

Cuando la quito de su cuerpo la pasó por sobre los hombros de la rubia para cubrirla dejando al descubierto las vendas que cubrían parte de su cuello, después de todo no había pasado mucho tiempo de aquel ataque de Humberto. Pues aunque bebió la sangre de su hija, no sería tan efectiva como lo sería la de su mujer... Su Frejya.

Después de cubrirla, levantó la mirada para encontrarse con la de la mujer y volvió a abrazar a la McCloud, esa reina seguía siendo una amenaza, hasta que le demostrara lo contrario.

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Esa última pregunta fue como si de repente le hubiera caído en cabeza un enorme balde de agua helada. Gruño furioso y golpeó sus manos contra el mueble donde había puesto la medicina y la pomada.

-No...- Bufo con fuerza, molesto por esa maldita palabra. La odiaba, detestaba ese hecho tan natural, no le temía, sabía que tenía que pasar pero... Odiaba que en algunas personas fuera tan pronto.- No te vas a morir y no vuelvas a decirlo ni a preguntarlo.- Verbalizó con ira. Se quedó de pie dándole la espalda a la pequeña.- Debes comer bien, no importa que tú no quieras, si tu cuerpo lo necesita lo comerás y me aseguraré de que así sea.- Le prometió, lo que significaba que ya no regresaría a casa, se quedaría con ella para protegerla y cuidar de todos los que habitaban aquel lugar protegido por los aliados de Cys.

Sonrió aliviada, derramando por su mejilla una lagrima mientras asentía.-Mo Cys...-Respondió ella dejando que él le colocara el saco, sacando su cabello largo por detrás y mirando de reojo a la reina. Esa mujer parecía tan tranquila despues de lo que habia hecho.

-Puedes tranquilizarte...-la mujer sonrió.-No te quitaré a mi ninfa, no seré yo quien lo haga.

-*Nosotros no somos seres de lucha, somos seres de amor y armonía. Mi lazo no perjudica a nadie de nuestro pueblo*-Frejya habló en su idioma, intentando mantenerse calma, la mujer era alguien a quien debía temer, podría llenarla de bendiciones o por el contrario hacerle mucho daño.

-Estas en mis tierras, por respeto debes acatar nuestras costumbres. No somos seres de guerra pero protegemos a los nuestros ¿Lo entiendes hijo de la sangre y la luna?

Frejya bajó la mirada, la reina sabía que Cys no era un vampiro completamente pero tampoco estaba de acuerdo con su unión. Cada vez que ellos, los ancianos acudían a Frejya era para actualizarla, para darle nuevas indicaciones, para darle más pistas de su pasado, de quien era ella, de donde estaban sus padres... y su hermano.

-El collar que tienes.-La hada reina señaló el colgante de Cys, moviendolo ligeramente para poder quitarselo de su cuello.-No te pertenece.

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Magali se encogió de hombros, apretando sus manos a la sabana. ¿Claus se había enojado? Asintió a lo que él decía, aunque no quería comer, tendría que hacerlo, eso no le gustaba, pero no dijo nada, se mantuvo callada, ella se sentía muy pequeña cuando alguien se molestaba.

Busco con un suave movimiento la m,ano de Frejya para sujetarla mientras ella hablaba. Le costaba comprender sus palabras, eso le jodía en demasía pero no importaba qué, estaba seguro que Frejya estaba defendiendo lo mismo que él pretendía cuidar.

Afilo la mirada al ser llamado de esa forma. Si, era un híbrido y hasta ese momento se sentía orgulloso de quien era, pese a sus acciones y el oscuro pasado que lo seguiría por siempre, gracias a la ninfa pudo aceptarse hasta ciuerto punto... aun lo estaba aprendiendo y ¡Joder! tendrían una maravilosa familia.

Con su mano libre sujeto el collar que pretendía arrebatarle.- Tampoco te pertenece a ti.- Dijo de golpe, aferrandose al regalo que Frejya había dejado para él, si, así lo consideraba, un obsequió con el que podría encontrarla no importaba a donde intentara ir.- Yo no respetare nada ni a nadie que no respete lo que amo y pretendo proteger con mi vida si es necesario.- Mostro sus enormes colmillos. Estaba a la defensiva, desconfiado de todos ellos. Entendía una cosa: Frejya era muy importante en ese lugar, tanto como lo era para él pero la forma en la que intentaron separarlos...

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El silencio de la pequeña lo hirió. <<Grandicimo idiota>> Se dijo a él mismo y entonces, con lo que necesitaba en mano fue hasta doind ela pequeña sin verla, se dio la espalda mientras se sentaba en el piso y se apoyaba en la cama aun sin mirar a la cama. Se estaba desquitando con ella. No le gustaba como sucedían las cosas. Sus hermanos no estarían cerca, su madre estaba en quién sabe donde y... entonces comenzaba a sentirse un tanto sólo. No le gustaba no saber de ella, no saber con exactitud que harían sus hermanos... todo se estaba saliendo de sus manos.

-Lo siento Magali. No es un buen día... no lo es.- Murmuro agachando la mirada mientars que con ambas manos sujetaba su nuca para presionar un poco. Intentaba, buscaba calma para tratar de la mejor forma a esa niña que lo necesitaba... que él necesitaba y aún no entendía.

-Esta bien..-Magali volvió a asentir con algo de tristeza, aunque sus palabras eran sinceras, aceptaba la disculpa de Claus. Se levantó un poco y arrastrandose abrazó la cabeza del lycantropo con todo su cuerpecito o por lo menos así lo intento. Sus cabellos sueltos cayeron a un lado, tenía algunos pegados a la cara, cubriendo su fea quemadura, es que su mamá había provocado. Había personas que no merecían ser madres, pero Magali era una niña pura, si tan solo su madre hubiera dicho "Lo siento" Magali hubiera olvidado todo el daño.-Me comere todo...-su voz temblo un poquito.-lo prometo.

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-¿La amas?-La reina se levantó.-¿A algo que no conoces?-El amor era tan misteriosos, ni los mismos dioses podían descifrarlo, porque el amor había aparecido, ¿de donde venía? ¿Quien lo había inventado? Era tan caotico y tan poderoso, destruía y creaba maldiciones, daba vida y ocacionaba la muerte... los dioses no eran inmunes al amor, mucho menos los mortales... el amor lo hacia todo y lo volvía nada.

-Sabemos lo que tenemos que saber.-Dijo la rubia, haciendo que la reina sonriera dulcemente.

-¿Pero que sabe él de ti?-Miró a Cys.-Ni siquiera entiende nuestro idioma. No respeta nuestras costumbres... toma tu sangre sin estar bendecidos por Era. ¿Estas segura que él te ama? O solo eres tu quien lo hace.

Cys abrió los ojos de golpe por la primer pregunta ¿Qué si la amaba? No lo dudaba ¡Joder! ¡Por supuesto que no lo dudaba! pero al segunda lo dejo un poco en shock ¿Algo que no conocía? Fueron palabras hirientes, al menos para él.

Esa mujer tenía razón. No sabía mucho de ella y sus costumbres, su mágico mundo. Hizo puño su mano con la que sujetaba el anillo y lo hizo con tanta fuerza que termino haciendose daño pero no lo sentía, lo delataría la poca sangre que derramaría.- Es verdad...- Levanto la mirada y enfrento a la mujer que le juzgaba.-... Quizá aun no se mucho de Frejya. Quizá no he intentado averiguar más de lo que es en su totalidad pero... por eso estoy a su lado, porque cuando sepa lo que realemnte soy, dedicare mi todo a ella. ¡¿Cómo no voy a amar a alguien que ama a un ser que tampoco sabe que es de él?!.- Exclamo con dolor, aceptando frente a esa desconocida lo mucho que aun desconocía de él mismo.- Por ti... -Dijo, mientras se dirigía a Frejya.- es que quiero saber cual es mi lugar, cual es mi objetivo, cual, además de ti..- <<Y mi futura familia>> pensó.- es mi razón de seguir viviendo.

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Justo en el momento en que ella le abrazó se quedo un poco impresionado. No lo espero. Magali era una niña demasiado buena. Aparto sus manos de su nuca y suavemente busco la cabeza de la pequeña para acariciarle un poco la cabeza.- Lo siento.- Dijo de nuevo y con sus manos la tomo de la cintura de tal manera que termino levantandola, girandola sobre su cabeza para despues ponerla sobre sus piernas y así poderle dar un abrazo. Claus daba la impresión de ser un chico duro, uno que detestaba el contacto, que parecía no conocer el cariño ni como compartirlo pero, pese a su poca expresión facíal, sabía como darlo. No por nada Anke lo adoraba, no por nada su madre también le quería, inclusive sus hermanos que si, en veces se sorrpoendían pero aun así, ese era Claus. Un chico muy poco común, dejando de lado su verdadera naturaleza.

-Yo comere contigo... estare contigo todo el tiempo. Lo prometo, Magali.

Frejya había apretado los labios al escucharla, ¿Que si Cys no la amaba? Ella siempre había dado todo por cada ser que pretendía salvar, la mayoría del tiempo siempre era ella quien se encariñaba de más, a quien siempre le costaba separarse. Entreabrió sus labios para decir algo, algo como "Tal vez él no me ame pero yo a él si" cuando lo escuchó >>¡¿Cómo no voy a amar a alguien que ama a un ser que tampoco sabe que es de él?!<< El corazón de Frejya latió con fuerza, sus mejillas se sonrojaron y la mano que sostenía el frente de la gabardina para que no se abriera se apretadon con más fuerza. Él la quería, el la "amaba" Sabía que tenían poco tiempo de conocerse, también sabía que había muchas cosas que ella aun no conocía de él, pero lo lograrían...

-Somos fuertes... por favor, he acudido a ti para recibir tu aprobación. Mi reina, dejame ser feliz a su lado.-Frejya la miró a los ojos, la reina solo la examinaba.

-¿Realmente sabes quien es este chico para estar dispuesta a sacrificar tanto por él?-Shaarabi, la Reina madre sonrió con calidez al pelinegro, esperando la reacción de la ninfa.

-Si.-Y solo eso basto para que todo se detuviera mientras la reina se levantaba y caminaba a Cys. Era como si el tiempo se hubiese congelado, el agua se había quedado estatica incluso mientras caía de la fuente.

-Shhh...-Shaarabi levantó una mano a Cys, él y ella eran los únicos que se movían.-Ella esta bien.-Mientras ellos hablaran no pasaría ni un segundo en el tiempo normal.-Ella ha dicho que sí. -El cabello de Shaarabi arrastraba el suelo, era hermosa, como una Frejya elevada a otra potencia.-Te haré la misma pregunta a ti.-Bajo la mirada, la reina sabía lo que él le diría, pero quería escucharlo, anhelaba saber su respuesta.-¿Realmente sabes quien es esta chica para estar dispuesto a sacrificar tanto por ella?


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Magali sintió sus labios temblar y seabrazó con fuerza a él, asintiendo y parpadeando con rapidez.-Te quiero Claus.-Le dijo con ternura y amor de niña, sin malicia, en su más pura forma.-También estaré contigo?-Le miró con cuidado-E iremos al parque con todos. Con Leo, Lucia, Ana y Demon...-empezó a contar con sus deditos.

Para ser sincero, Cys no esperaba la aprobación de nadie, sólo la de Frejya, que ella le aceptara tal y como era, con esa oscuridad que con su compañía iría iluminandose. Necesitarían tiempo, quizá mucho, quizá no pero lo necesitaban.

El moreno miraba a la ninfa mientras hablaba con la reina. Intentaba estar al tanto de todo lo que le rodeaba pero era demasiado, magía en cualquier lugar que mirara, todo bajo el control de esa mujer extraña, esa que parecía no querer verles juntos.

Se unió un poco a ella, si, eran fuertes y haría cualquier cosa por permanecer a su lado. Tragó un poco de saliva cuando la reina hizo aquella pregunta. Aún más cuando le miro de esa manera tan... cálida. Frunció ligeramente el ceño, le costaba recibir ese cierto "cariño" de parte de extraños. Le costaba aceptarlo, seguía siendo un tanto negativo hacía él.

Se altero un poco cuando Frejya no se miovió. Ciertamenet enseguida acuso con la mirada a la Reina pero no se aparto de la rubia. Abrió la boca pero la cerro. Miro detalladamente a la mujer, era hermosa, muy hermosa pero no, imposible superar lo que era y significaba Frejya.

-Si...- Dijo interumpiendo su pregunta, no dejo que la terminará porque ella lo dijo, sería la misma pregunta. Gruño.- Se que no ha pasado mucho pero ella...- Guardo silenció y miro a la mujer a los ojos.- Si. Dare todo de mi, lo que sea necesario para estar siempre a su lado.

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El chico asintió con la cabeza a las palabras de la niña. "Ich Liebe Dich" le había respondido con la misma intención de la niña. Claus quería a Magali, en verdad había desarrollado un sentimiento especial por ella. Quería protegerla y hacerla feliz. No sabía por qué pero lo haría.- Si Magali, iremos todos a donde tu quieras, pero tienes que mejorar ¿Si?