Cys y Frejya, -Cap. 2-

Cys miraba de reojo la salida de aquel lugar pero intentaba centrarse en otras cosas. No era justo ¿Qué pretendía? ¡Joder! Ni él mismo se entendía, era tan difícil poder aclarar las ideas cuando se trataba de ella. Gruño y golpeó la mesa olvidando que Ana estaba ahí con él. Entonces la escucho. Se sobresalto y se giro para verle con las pupilas un tanto oscuras o más bien, casi mostrando un pequeño intento de dorado.

Se le quedo viendo a la mujer. Escucho con atención. Por supuesto que entendía aquello y sabía que no sólo ella, seguro que todas en general veían en Frejya una hermosa hermana, incluso una madre, era parte de esa familia... una gran familia. Asintió con la cabeza.

-Lo seré...-Dijo con una sonrisa de medio lado. No estaba seguro de como iba hacerlo. Sólo conocía una respuesta, la misma para todo "Sólo aléjate Cys, no necesitan sufrir por alguien que no tiene futuro". Tomo la malteada que la mujer le daba con ambas manos y la miro a los ojos por unos segundos y sin más dio media vuelta para salir de ahí, aunque tomando otro camino, directo a aquella habitación donde Frejya lo había atendido.

<<¿Qué significa todo esto, viejo?>> Cuestiono al cielo, mientras pensaba en Dimitri, aquel hombre que le había criado y le había enseñado todo cuanto sabía <<¿Por qué no quiero alejarme? ¿Por qué quiero estar lejos al mismo tiempo?>> Abrió la puerta y dejo la malteada sobre un mueble. Inhalo y suspiro, podía oler aun su sangre. Trago saliva. <<Nunca me explicaste nada sobre estos sentimientos>> reclamo al hombre que ya había muerto mientras caminaba a la cama y miraba el lugar donde ella estuvo, aunque fuera por unos segundos. Era como tenerla frente. Cerro los ojos y la escucho, ella lo llamaba. Tensó la quijada <<¿Por qué no me lo dijiste correctamente?... No soy un humano ¡Maldita sea! ... ¡Nunca fui como tú!>> Abrió los ojos y... sabía que estaba perdido, por completo. Suspiro y se dejo caer en la cama. La quería, quería a esa rubia a su lado... tanto como para olvidar la promesa que le había hecho a su viejo <<Dímelo... ¿Estoy haciendo lo correcto? ¿Ella podría ser feliz junto a un... ¿Podría hacerla feliz?>>

-¿Donde esta Cys?-Preguntó a Ana después de haber regresado a la cocina. La mujer comía una galleta mientras miraba la ventana.-¿Esta todo bien?

-Frejya, tu lo sabes mejor que yo... esto no dudará mucho.-La feerica apretó sus manos. Si, ellos hacian un gran esfuerzo por ganar dinero y mantener el orfanato pero era dificil, no podían, había niños que necesitaban cuidados especiales y aunque todas lo intentaban, aveces era demaciado.-Deberías ir a ser feliz a otro lado Frejya, no quiero que veas nuestra pena...

-Ana porfavor...-No dejo que continuara.-Este lugar esta lleno de magia y amor, jamás.. jamás podría pensar en irme.-La tomó de la mano.-Encontraremos una forma de mantener todo eso, saldremos adelante, yo... yo haré algo, no podemos dejar a los niños así.-Beso su frente y le limpió una lagrima-S-Se lo mucho que... que te importa esto.

-Tu eres maravillosa, eres un ángel.

-Ustedes me han salvado Ana...-Sonrió.-ustedes me dieron una familia cuando más lo necesitaba, por favor Ana, no le digas nada a Cys. No quiero que él sepa, se va a preocupar.

-A él le gustas, lo sabes.-La feerica se sonrojo y bajo la mirada, ella no estaba tan segura.-Inevitablemente a todos les gustas, Will por ejemplo. Pobresillo.

-Lo siento, no quise causar esto, tu hijo...

-Shhh... Will no debe saberlo.-Ana sonrió.-Él debe entender que no eres para él. He vivido algun tiempo pequeña y nunca te había visto mirar a Cys como lo haces. Estas enamorada de él.

-No.-Dijo ella dando un paso atrás.-No lo estoy s-solo... s-solo me gusta mucho.

-No conozco tu mundo, se que hay riesgos, pero has algo bueno por ti de una vez.-La rubia levantó la mirada, Ana lo decía tan fácil pero ella no lo estaba, estar enamorada significaba que moriría si la dejaba. Y Cys parecía querer dejar todo, aun no era tiempo de enamorarse, no tan rápido, todabía faltaba mucho por ayudarle, él aun no la veía como su luz... él no...

-Tengo que irme, volveré mañana. Mmmm ¿donde esta Cys?-Se alejó y caminó a la puerta, debía ir a la habitación.-Ana no lo estoy.

-Frejya.-Ana la miró y negó, pero no dijo nada, Frejya no le había contado la historia completa, pero la primera vez que se miraron, ella estaba pasando por un periodo de obscuridad muy severo.-vayan con cuidado, yo los despediré de los niños.

Cys continuaba cuestionándose si estar en ese lugar era correcto ¿Por qué no sólo se iba y ya? Era tan simple como había aparecido pero... no, definitivamente no iba a poder, por mucho que lo deseara, no podía estar. Bufó molesto y entonces su móvil comenzó a vibrar. Se quedo quieto. Eso no era bueno, ese teléfono nunca sonaba, al menos que algo malo estuviera sucediendo en casa. Se sentó en la cama y tomo el móvil, era Claus... que casualidad.

-Claus ¿Qué sucede?- Cuestiono el moreno que termino por alejarse el aparato del oido, los gritos de su tía casi lo dejaban sordo.

-¿Donde diablos estas jovencito? Saliste de la casa como si nada, sin avisarme ¡Sin avisarme!- Gritaba Lea completamente preocupada por su sobrino, porque Cys al menos dejaba una nota o algo parecido, ese día no había dejado nada y olvidaba lo exagerada que podía ser Lea Jaeger.

Espero unos segundos más, hasta que el aire se le acabo a esa encantadora mujer.- Estoy bien... estoy con..- Cerro los ojos.- Estoy con Frejya- Y otro grito más lo hizo hacer una mueca ¡Esa mujer estaba loca!.

-¡Pasame a esa encantadora muñequita!

-Esta ocupada, ahora no puede atenderte, le diré que le mandas saludos.

-Mejor tráela a casa, invítala a comer.

Cys carraspeó un poco y se quedo en silencio unos segundos. Ambos en realidad. Lea sonreía, porque no necesitaba estar junto a él para saber que algo le estaba dando vueltas en la cabeza.

-¿Qué pasa cariño? ¿Esta todo bien?

-No tía... necesito que hablemos.- Lea entonces sintió algo muy fuerte en su corazón, fue emoción, su sobrino la necesitaba, Cys quería que le escuchara. Se conmovió tanto que tuvo que contener las lagrimas y ¡Sólo era la segunda vez que miraba a esa linda hada!

-Te escuchare Cys, estoy aquí para ti ¿Si?

-Vale. Ahora, necesito hablar con Claus, por favor.- Espero a que la mujer se des´pidiera y le pasara el móvil a su primo, el segundo de los 5, ¿Cómo se tomaría o que le diría?... Sólo esperaba que le apoyara.

-¿Cys?- Una voz grave y muy masculina se escucho al otro lado. Claro, ese era Claus, incluso eso los diferenciaba. Claus tenía la voz más grave, y madura a comparación de Günter o Alaric.- ¿Qué sucede?

-Necesito que vengas aquí, tengo algo que pedirte y es muy importante. Lo mejor es que traigas contigo los papeles necesarios para financiar un orfanato.- Claus entonces se sorprendió de más ¿Cys le estaba pidiendo un favor? Cys estaba actuando extraño pero... algo en su interior le hizo sentir emocionado: Su líder estaba actuando. Claus sonrió de lado.

-Entiendo, entonces nos vemos en un momento.- No necesitaron decir más. Claus encontraría a Cys en cuestión de segundos, era, de los 5, el que tenía el mejor olfato y claro, él más inteligente. Si, era perfecto para lo que quería hacer. Hecho aquello tomo sus cosas, su gabardina echa mierda y el batido de Frejya, tenía que dárselo. Era hora de ir a buscarla. Salió de la habitación la cual termino por ordenar y camino por los pasillos, evitando el de los niños, no quería arruinar su película.

Caminaba, pensaba en lo que Ana le había dicho. "Enamorada" Ella aun no debía estar enamorada. No aun... no mientras él siguiera pensando que la vida no era lo suficientemente buena. Además ella debería estar pensando en su hermano, en la manera de encontrarlo y encontrar a sus padres "Calmate Frejya, calmate" Dio la vuelta y acarició un mechón de su cabello rubio largo, debería buscar a Cys y deberían regresar a casa.

-Oh...-Dijo de pronto, chocando contra alguien.-P-Perdón.-Levantó su cara y lo vio.-mm.. p-perdón...-Dijo sintiendo u corazón latir con fuerza, las palabras de Ana retumbaron en su cabeza. Cys, Cys le gustaba, ¿y que tenía de malo estar enamorada? ¿Pero si él no lo estaba? Dioses, ella era un hada que podía reconocer las emociones, ¿porque era tan dificil reconocer las suyas?-E-Estaba buscandote.-Le dijo.

Para Cys no sería nada difícil encontrar a la ninfa, simplemente se trataba de seguir su olor y su olor no era cualquiera. Siempre que la percibía, venía a su mente un recuerdo que le gustaba mucho, uno que le hacía sentir calma en su persona. Sus flores preferidas eran las rosas, Dimitri le había contado que cuando pequeño, lloraba bastante pero que, cuando una de las monjas llevaba consigo unas rosas había dejado de llorar. Entonces supo que las rosas lo calmaban. Supuso otras mil cosas, tales como que en su cuna ponían rosas por las noches y... no recordaba las otras pero esa fue la que por alguna razón le pareció más lógica. Lichi, podría sonar extraño, pero esa fruta tenia un agradable sabor a rosa, al moreno no le agradaban las frutas pero, esa era especial... Frejya sabía a Lichi... era gracioso pensarlo pero... así sabía su sangre y su piel. Tragó, sacudió la cabeza tratando de sacar ese pensamiento de su cabeza y justo en ese momento sintió que alguien chocaba con él, retrocedió un paso y la mitad de la malteada estaba sobre su ropa. Levanto la mirada para verla y enseguida extender su mano libre y rozar con las yemas sus labios.

-Estoy bien, fue sólo un accidente.- Dijo sin apartar sus dedos de sus labios. Le sonrió y trago para apartar su mano a regañadientes.- También te buscaba... quería darte esto pero...- Se encogió de hombros, estaba repleto de caramelo, al menos el de la malteada.

-Oh por!-Sus ojos le miraron sorprendida, Cys tenía caramelo por todas partes ¡Por todas! Tragó lento, entrebriendo sus labios, ¿era algun juego de la vida? Poner su sabor favorito en el hombre que le gustaba? "Del que estas enamorada" le recordó Ana en su cabeza.-N-No... perdón y-yo...-Tomó la malteada y negó.-Soy... soy tan torpe -mordió su labio inferior, allí donde la yema de Cys le había dejado un ligero cosquilleo.-Iré a buscar ropa, no, mejor n-no el baño esta por allí y...-Se giró nerviosa a él de nuevo, con un ardor en sus mejillas, quería lamerlo y su cuerpo lo demostraba, sus pupilas estaban ligeramente dilatadas por la curiosidad y también una chispa de deseo.

-No digas eso, no eres torpe.- Expreso con cierta seriedad. No le gusto que ella se llamara de esa forma, era tonto porque él si podía insultarse, tenía que aprender a dar lo que pedía. La vio tan desesperad que limpió su mano sobre su ropa ya sucia y la sujeto de los hombros justo cuando se giro hacía él y se inclino.-... Esta bien... es sólo ropa... me daré un baño y ¿Podrías lavar mi ropa mientras lo hago? Se que podrías buscar ropa pero, esta es especial.- Lo decía por lo del sol, le protegía más que cualquier ropa en venta el las tiendas humanas. Avanzó hacía el baño después de soltarla y antes de entrar se quito la camisa negra de manga larga. Se giro para entregársela.- Gracias...- Dijo un poco nervioso y no por haberse desvestido, oh no, fue por aquella mirada... joder, un instinto muy salvaje quería ir a por ella pero... no, no iba a dejarse llevar por eso. Entro al cuarto del baño y termino por desvestirse completamente, abriendo la puerta y sólo dejando salir su brazo con la ropa sucia... quería apresurarse, Claus había llegado.

-(-)-

Había sido un interesante camino el cual había tomado su primo. El bosque, la ciudad, callejones, sangre. Había fruncido el ceño, le habían hecho daño a Cys, ya preguntaría al verlo. Miraba la enorme casa ¿Por qué Cys querría comprar ese lugar? Era interesante, en verdad quería escucharlo, sonrió, seguro que Frejya estaba de por medio.

Claus era un apuesto joven de cabellera castaña y risada, igual que sus otros tres hermanos, sin embargo, era fácil diferenciarlos según él y sus otros hermanos. Se acerco al gran portón y toco la puerta, esperaba que alguien le recibiera enseguida.

Musculos, pectorales, había tripces y biceps y varias partes más del cuerpo masculino que no había visto antes. Sus labios se entreabrieron, todo había sido tan rápido que apenas y había tenido tiempo de pestañar.-mmm... v-vale.-Apretó la camisa contra sí y olió. Cys y caramelo... lamió sus labios sin darse cuenta y luego se giró para avanzar a la lavandería, hasta que lo escuchó.

-Frejya sabes donde...-Lucía miró la ropa que ella tenía, su mirada se afiló un poco.-¿Esa es la ropa de Cys? Por dios, ¿donde esta Ana?-La chica apretó su colita de caballo con el lazo rojo y caminó.-¿Es tu novio Frejya?-La feerica no contesto y Lucía abrió la puerta.-Entonces me lo quedaré yo...-Se giró y abrió un tanto los ojos al verlos, ¿como es que había hombres tan atractivos depronto en esa casa?-er... d-di-di-diga?

-....- Claus entonces arqueó una ceja cuando esa chica abrió la puerta y dijo aquellas palabra. Había escuchado lo necesario y rió un poco. Pobrecilla, quería verla intentar eso y supuso que se´ria divertido ver como Cys la rechazaba o...- Busco a Cys, se que esta aquí y...- Miro por sobre el hombro de la chica, era mona, encantadora hasta cierto punto y entonces miro a la ninfa.- Frejya... Buenas tardes.- Dijo con una educación salvaje, una elegancia sobre natural y una belleza inhumana. Regreso su vista a la chica que aun tenía frente a él.- Mi nombre es Claus, mucho gusto...

-(-)-

Cys dejaba que el agua mojara su cuerpo, se estaba enjabonando mientras continuaba con aquellos pensamientos sobre Frejya y lo que le hacía sentir ¿Qué le diría su tía? Eso le estaba haciendo sentir impaciente y extraño. Sacudió el cuerpo completo y cerro la llave. Era un baño rápido y bueno, esperaría su ropa ahí dentro o quizá no... Claus estaba en la gran casa.

-Claro... ¿que?-Se giró a Frejya ¿también la conocía?

-C-Claus.-Sonrió con suavidad.-Pasa por favor.-Lucía le dio el paso y asintió.

-Lucía...-Le dijo en respuesta algo atontada, para luego sonrojarse y enojarse con ella misma, no era justo, Frejya acaparaba toda la atención, desde Will, el chico de la contaduría, el jardinero, el mercader, Cys y ahora el sexy chico que entraba.-Mmm estaré con los niños.-Dijo entonces caminando a con los crios, ahora estaba enojada.

-Cys se esta bañando.-Miró la camisa que aun no lavaba y se sonrojo.-T-Tiré un poco de malteada sobre él. Lo siento.

Agradeció que le permitieran entrar y se acerco a Frejya. Miro de reojo a Lucía y sonrió para sus adentros.- Es un placer, Lucía...-Dijo y entonces miro a Frejya apenas la otra chica desapareció de su vista.- No espere que fuera a verte tan pronto ¿Sabes? Pero es agradable.- Por supuesto, ella estaba logrando un cambió en su primo, en su líder.- ¿Le sucedió algo?- Escucho la explicación y sólo asintió. Comenzó a ver su al rededor.- ¿Qué es este lugar, Frejya?... Parece que a Cys le ha gustado bastante... hmmm viene en camino.

-(-)-

Cys no iba a esperar mucho por lo que seco su cuerpo y termino amarrando una toalla a su cintura, cubriendo lo esencial para ir en busca de su ropa y de Claus, quería hacer las cosas rápido para que su primo actuara con prisa sobre el lugar en el que cuidarían a cuanto niño lo necesitara.

oH.-Frejya caminó junto con él al cuarto de lavado.-mmm es un orfanato.-Le contestó y empezó a tallar la camisa, ella jamás había usado una lavadora antes-¿Quien viene en camino? -Levantó la vista, oliendolo, de alguna manera el aroma del lycan se había vuelto más intenso. Se estremeció y mordió su boca.-Hay algunos....

-¿E-Esta el villano?-Susurró una niña muy despacito, asomando su cabecita y dejando ver una mejilla quemada.

-Magali.-Le dijo Frejya soltando las cosas y avanzando hacia ella.-¿Que haces aquí cariño?-Sonrió con dulzura a lo que la niña se acercó, sin dejar de ver a Claus, susurrandole al oido.

-¿Quien es ese señor?

Mientras caminaba analizaba el lugar. Era interesante. Conocía in orfanato donde aceptaban a toda clase de niños, sin importar su raza pero los ocultaban para protegerlos, además, estaba en medio de la ciudad, era propiedad de un hombre bastante adinerado... Tenía ideas, bastantes ideas. Se le quedo viendo a Frejya, aun no metía la ropa a la lavadora... Arqueó una ceja.- Frejya tu sa...- No termino la frase cuando se giro y vio aquella linda niña. Se acerco donde la ropa y la recogió para encender la lavadora y ponerla a trabajar. Busco el jabón y de más.

-Su nombre es Claus, es uno de mis más confiables secuaces, Princesa Magali. Él también esta a su servicio.- Dijo Cys apareciendo por detrás de la pequeña, con tan sólo la toalla, no tenía dobles intenciones ante su desnudo pues no era como que mostrara de más. Cys sonrió, Claus lo miro y si que se llevo una gran sorpresa, de verdad pero estaba contento por eso ¿Desde cuando Cys jugaba con niños? Se aparto de la lavadora y se arrodillo frente a la pequeña. No dijo nada, sólo esas acciones.

Frejya abrió los ojos un poco más al verlo a él así. Ella generalmente toleraba los desnudos, como una hada de la tierra su raza era libre y sin ataduras sin embargo ver a Cys de esa manera le puso la piel de gallina por toda la columna vertebral.

-Tambien?-Preguntó mirando al otro señor que se había arrodillado. La niña lo miraba, timida y un poco desconfiada, incluso cuando él se arrodillo, pero al ver la sonrisa de Frejya, Magalia también sonrió, poco a poco.-S-Soy Magali...-Se escondió otro poco tras Frejya y luego, armandose de valor salió de nuevo, dejándose ver más.-Puedes decirme Mag.-Le dijo.

Frejya se levantó y sus ojos se prendieron en Cys, su respiración se agitó otro poco pero al final logro calmarse, volviendo a la lavadora.-No... no esta seca aun.

Cys miraba de reojo a Frejya, porque sus reacciones... todo le afectaba incluso a él. Su frecuencia cardíaca aumentaba... demasiado, pero termino mirando a la pequeña, extendiendo su mano para que se acercara a él.

-Es un tanto silencioso princesa, pero obedecerá tus ordenes. No debes temerle, él te protegerá.- Dijo y espero a que la pequeña se acercara a su primo ¿Eso seria agradable para Claus? No sabía pero bueno, tendría que acostumbrarse a los niños. Se aparto de ellos para ir junto a la ninfa. Ella se alteraba de nuevo y él... Trago.- Bueno, podemos esperar aquí...- Dijo con media sonrisa... si, podrían esperar.

Claus miro a a pequeña.- Mag...- Inclino un poco la mirada para verle fijamente y le sonrió un poco.- ¿Somos los villanos, my lady?

Se levantó en toda su estatura, no era demasiado alta, más bien le llegaba casí al hombro-Si...-Se acomodó un mechón de cabello.-¿Porque lo ha llamado?-Preguntó, aunque ya se sospechaba algo. Bajo la mirada unos instantes para luego volverse a sus ojos, las orbes de Frejya lo miraban cuidadosamente, tan azules como el mar.

-Si-Dijo ella tomando su mano.-Él es Timoty-Le entregó un muñeco de peluche, era más bien un conejo flaco y largo porque le faltaba relleno, estaba algo mugriento porque Magali jamás quería que se lo quitaran. Es t-tabien un villano.

-Lo sabrás cuando nos reunamos con Ana. Sólo espero que lo que planeo te haga feliz.- Si, quería verla sonreír y no sentirse preocupada por la situación del lugar. Iba a darles lo mejor a esos niños con los cuales se sentía identificado, totalmente. Cys extendió la mano para tomar la de Frejya y seguir mirándola. Sus ojos eran precioso. Necesitaba tocarla aunque fuera de esa manera.

Claus miro de reojo a la parejita y entonces tomo el peluche de la niña. Vaya, quería conocer las instalaciones, todo.- Princesa Magali ¿Me daría un recorrido por todo su castillo?- Y le extendió su mano libre, esperando que lo alejara de tanto romance .

Abrió sus ojos de más, llevandose una mano a su pecho.-¿A mi?-Sonrió.-No deberías hacer esto solo para verme f-feliz a mi.-Le di su mano con delicadeza y suavizó su mirada-Has hecho muchas cosas por ellos hoy... eso es más que s-suficiente para hacerme feliz Cys.

Asintió sin notar a Cys y Frejya realmente-¿Tu mamá también te dejo?-Preguntó mientras se rascaba un poco la mejilla quemada, aveces picaba.

-Tu eres mi principal motivo Frejya...- Miro de reojo a Claus saliendo con Magali.- Y todos ellos...- Suspiro.- Yo los entiendo Frejya y no me parece que sean víctimas de la injusticia, un niño no debe sufrir, debe ser feliz y disfrutar su infancia... quiero que ellos recuperen lo que han perdido.- Si, porque lo lograrían, encontrarían una familia que los valoraría.. de verdad. Le acarició su mejilla con la mano libre.- Gracias por ayudarme...

Claus entonces tomo la mano de Magali con suavidad. Esa niña le recordaba de alguna manera a su hermana. Claro, Ray y él se encargaron del resto, aun siendo de la misma edad, ambos tomaron o intentaron tomar el lugar de su padre cuando él murió.- Puedes hacerte daño...- dijo y camino junto a la pequeña.-...- Que pregunta... joder. Negó con la cabeza.- Mi madre... me espera en casa.- Dijo sincero, no iba a mentirle a la niña aunque... - ¿Te gustaría conocerla?

Ella bajo la mirada, de alguna manera saber eso le hacia muy feliz, sintió que sus ojos se cristalizaban por ello. ¡Oh dios! Ella en verdad estaba enamorada de él... en verdad estaba enamorada de Cys Dinter.-Gracias a ti...-Le dijo, por dejar que ella se acercara solo un poco más.

Magali sonrió y negó.-No.-Le dijo porque no quería conocer a ninguna mamá.-N-No le voy a gustar porque soy fea.-Miró al suelo, encogiendose un poco.-t-tengo mi cara fea.-Se rascó de nuevo la marca, cuando se ponía muy nerviosa se la rascaba.-Vamos a jugar con Timoty..-la niña tomó a su conejo y empezó a picarle los ojos y a darle besitos.-e-el si me quiere.-Rió, en la inocencia de una pequeña que había sufrido mucho.

-¿Frejya?- La llamo al ver sus ojos un tanto cristalinos. Iba a preguntarle si estaba bien, quizá había dicho algo malo. Abrió la boca pero justo en ese momento, la Lavadora se detenía, su ropa estaba lista. No le importo mucho.- No... No llores. No me gusta verte llorar.. menos por mi culpa...

-(-)-

-¿Por qué...- No termino la frase cuando la niña le dijo todo eso. No... no se lo esperaba ¡Joder! Frunció el ceño ¿Cómo alguien podía herir a una niña de esa manera? Claus se molestaba bastante, pero no podía comparar, esa niña no era Anke... ¡Maldita sea, no era Anke! Pero era duro no poder recordarlo... La forma en la que aquel hombre abusaba de su hermana, cómo era que ella gritaba... Se tensó y dio un paso más largo para ponerse frente a la niña y agacharse a su altura. Le quito a Timoty de las manos y lo dejo a un lado.-...-Negó con la cabeza.- No Magali... Tu no eres fea...- Extendió una de sus manos pero, se detuvo al ver como la pequeña cerraba sus ojos. Estaba asustada. Joder, él era un extraño ¿Por que no le sorprendía?.- Magali... Princesa Magali ¿Quiere ser mi amiga?... Yo no creo que seas fea. Eres bonita... ¡La más bonita!.- Joder ¿Qué estaba haciendo? ¿Estaría bien?... ¡AH! Por eso no se acercaba mucho a los niños, siempre los asustada, su voz era muy... grave.- Princesa ¿Cree que su servidor le mentiría?...

-No es tu culpa.-Levantó la vista y le sonrió, aun con los ojos algo aguados.-Cys estoy feliz.-Le dijo para tomar su mejilla con dulzura.-No se como agradecerte, cada vez es más...

-¿Frejya?-La feerica dio un brinco y chocó su espalda con la lavadora. Ana había azomado su cabeza.-Oh... eh.. perdón, ¿Has visto a Magali?

-Esta con Claus, tu ropa y-ya... ya esta seca.-Se giró para tomar aquella prenda y sacarla, para extenderla, aunque... ¿con que botón se sacaba la ropa?

-Ya veo.... bueno, los niños más pequeños se han quedado dormidos, Valentine esa jugando con Marcos y Eliot, es el único que sigue despierto.-Rió.-esta tan lleno de energía. Un momento...-frunció el ceño..-¿quien es ese Claus?


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Cerró sus ojos y empezó a contar números, apretaba sus manitas a su vestido y luego él le decía todo eso ¿no era fea? ¿La más bonita?-Tengo la marca.-Dijo aun cerrando sus ojitos, encogiendose.-no e-es como la de las otras niñas. Como el hada madrina.

Cys se inclino de a poco hacía ella. Cada vez más cerca. Le miraba fijamente. Tragó saliva, quería escucharla. ¿Cda vez era más?.. ¿Más qué? ¡Interrumpidos! Eso era mala suerte, definitivamente. Cys le sonrió a la mujer y agradeció a Frejya, esperaría un poco, mientras tanto le explicaría a Ana un poco de lo que quería hacer.

-Es mi primo, no te preocupes.- Dijo sobre Claus.- Ana, me gustaría hablar contigo apenas este bien vestido, quiero ofrecerte una propuesta, a ti y a Frejya...- Le sonrió y se acerco a Frejya por detrás para estirarse un poco.- Es aquí...-Le dijo presionando el gran botón para poder abrir la puertita de la lavadora.

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-...-Cerro sus ojos y suspiro.- Pero a mi me gustas más la princesa Magali que el hada madrina...- Abrió los ojos para ver a la pequeña y sonreirle.- Eres especial pequeña, diferente al resto, como yo, como Cys y como los demás y eso, nos hace únicos... - ¿Así s ele hablaba a un niño? Joder, Sabía que su madre o su hermana serían la mejor compañía para la niña que él, era un idiota...

Se había quedado quietecita, sintiendo su aroma.-Gracias.-Se giró tan rápido que no se había dado cuenta lo cerca que estaban, tan cerca que por un instante sus alientos fueron solo uno.-...-Se volvió a la lavadora sonrojada, sacando la camisa y avanzando a un pequeño lugar para plancharla.

-Oh, esta bien.-Venga deja eso querida.-Tomó la camisa.-Tu no debes planchar, la última vez que Frejya planchó tardó mucho, dos horas para una camisa.-Listo.-Le dio la camisa en menos de 3 minutos, tan perfectamente planchada, pensó Frejya, que asustaba.-Fui de joven una encantadora lavandera, podía hacer de todo. Rió.-Entonces... mmm ¿cual era tu propuesta? ¡oh! pero que torpe, vayamos a la sala.-Sonrió, empezando a caminar sin esperar. La rubia rió, Ana era encantadora.

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-Yo quiero...-apretó los labios.-s-ser igual que los demás niños.-Abrió los ojos, sus ojos estaban húmedos. Asintió a sus palabras y al final levantó la mirada a él.-Ana dice q-que... no importa que... si puedo ser una bailarina, aunque tenga la cara quemada. ¿tu lo crees?

Ese momento en el que sus alientos se unieron fue... Cys se había quedado en shock, no espero que ella voltease tan repentinamente, no espero que la fuerza de su aroma casi no noqueara. Su cuerpo tembló un poco pero no hizo nada mas que esperar a que ella se apartara. Por mucho que se lo ordenara, el no pudo alejarse de ella.

Después de eso, escuchar a Ana y ver a Frejya supo una cosa; su ninfa necesitaba mucha a orientación. No sabia utilizar una lavadora y tampoco una plancha. No era como que tuviera que saberlo pero, podría hacerse daño.ya sotana completa,ente vestido, algo despeinado, pero no era nada importante ese hecho. Cys camino detrás de las mujeres y susurro el hombre de su primo. No necesitaba más, Claus sabría a donde ir.

Le conmovió, esa niña había logrado lo que nadie con Claus Jaeger. La tomo entra sus brazos y le dio un ligero pero muy cálido abrazo.- Por supuesto que lo creo Magali. Ya eres una princesa y serás la mejor bailarina del mundo.- Se apartó para verle a los ojos y entonces escucho a Cys.- El villano nos necesita... ¿Quieres venir conmigo?- Cuestino a la pequeña pues no quería dejarla sola en ese momento.