Oleg y Svetlana: La primera vez que te vi

-...Gracias.- Dijo un poco avergonzada mientras llevaba sus manos a su barriga. - Seguro Oleg podra conseguirlo para este museo, siendo el dueño... lo puede todo.- Aseguro la albina orgullosa del Yasikov, el padre de su hijo.- Por supuesto. 6 para ser exacta (No recuerdo su son 6 o 7 o.o)

-(-)-

-....-Arqueó una ceja. Odiaba eso, la inseguridad en un empleado. Le gustaba tener bajo su poder hombres de seguridad, hombres que no dudaban ni un poco y consiguieran lo que se les ordenaba pero no iba a presionarlo. Así que estaba interesado en su mujer, vaya, vaya. No era el primero ni el ultimo, pero debía cuidarse si no quería el mismo final que muchos.-...-Se le quedo viendo en silenció y negó con la cabeza.- Relajate y sólo has lo que te ordene ¿Entendido? Así funciona. Simple ¿Entendido?

-Que encantador.-Dijo Lena inclinandose a ver al bebé, bueno, no ver literalmente.-¿Ya saben lo que será?-Intentó borrar él "lo puede todo" que tontería. Solo era un don engreido.

++

-Claro.-Dijo.-Así de simple-Aunque por supuesto no estaba convencido. Lana era un hueso duro de roer, ¡joder! ¿Que pasaría si no aceptaba? -Bueno, solo hay que esperar a que los del titulo y nuestros abogados cambién todo a su nombre. ¿Quiere seguir observando la galería o prefiere ir a descansar con su... la señorita Romanov?

Asintió con la cabeza.- Sera una niña.- Dijo con una gran sonrisa (Listo, una chica no puede ser la líder según las reglas de los rusos e_e así nadie le quitara el puesto a Vlad xDD)- aunque aun no hemos pensado en el nombre de la pequeña. Quizá algo que concuerde con los de sus hermanos: Vladimir, Nikolay y Narkissa ¿Sería divertido uno que comience con V, no?- Dijo sinriente, porque ya había dos N, una V más no estaría mal.

-(-)-

-He dicho que te relajes. Si no lo logras no sucederá nada, me encargare de hacer el trato yo mismo, ve esto como una prueba, haz tanto como puedas.- Dijo mientras se ponía de pie y caminaba a sus alrededores.- No, déjalas a solas un momento, por ahora quiero beber algo. Un vodka no caería mal ¿No lo crees?

(D; una niña! r-r Narkissa la matará por ya no ser hija única e-e además eso es muy sexista r-r las mujeres también pueden heredar cosas asodajisdasdkoasdsd r-r ches rusos sexistas!)

Svetlana sonrió, ¿tenían más hijos? Era... bueno.-Oh.-Rió un poco y se encogió de hombros.-Bueno, no soy muy buena con los nombres para niños. ¿Quieres continuar?-Preguntó, de alguna manera no se sentía del todo... cómoda, era más bien una sensación de inquietud. Su celular vibró.- Permiteme un instante.-Pidió, era una llama de un de sus lideres.-Hola.-Habló en perfecto Aleman.-Si, aun estoy aquí.-Se llevó una mano a la garganta. Su lider era un vampiro, una familia poderosa de Suecia, ella no toleraba a los vampiros, además, sentía algo en su interior, algo muy raro al escuchar esos nombres. Porque esos nombres, Narkissa, Nikolay y Vladimir le hacían sentir algo muy raro, como si quisiera llorar.-Si, estoy bien...-sonrió y aclaró sus pensamientos, volviendo a su forma de ser normal.-Iré en un momento.-Era hora de retirarse.

-Lo siento-Regresó.-me temo que tendré que pedirle a alguien más que te acompañe.-Sonrió y caminó a su lado.-¿no estas agotada? ¿quieres sentarte?
++
++

-Er claro.-Si, pero Bodolf no tomaba, era más bien un ingles amante del té.-He servido a este museo desde que lo fundaron, es contemporaneo pero aun así me trae buenos recuerdos. Si me disculpa un momento, tengo que ir a por un paquete nuevo, tal vez sea de su interes.-

(e_e Cosas de Rusos xDDD Ya, esa niña no va a nacer e_e Nark sera la única nena xXD)

-Esta bien, no te preocupes, ya me encargare de ver todo cuanto conforma este precioso edificio. Anda, seguro Oleg regresara en cualquier comento.-Dijo la albina que suspiro y sobo su barriga mientras miraba uno de los cuadros que la morena le había explicado.

-(-)-

-Muy bien, adelante yo me quedare aquí, uno de mis hombres espera afuera.- Y así era, porque era tan lobo como Oleg, quizá no un Yasikov, pero si uno de sus fieles. Era peligroso, de cabellos rojizos y mirada intimidante. Tenían que hablar sobre la mujer que no sólo cuidado de él, si no de todos cuantos Svetlana había logrado unir a su causa.

(XDD jajajaja lol)

Svetlana sonrió y agradeció formalmente, girando por un pasillo y chocando por accidente por Badolf.

-Tengo que irme.

-Tienes que quedarte.-Ambos se miraron, Svetlana rió, había hablado al mismo tiempo que él.

-Ni de broma...

-Lana porfavor, es...

-Es urgente que me vaya.

-Tengo que persuadirte, quedate, a él le encantaría que tu te quedaras también en este trabajo, te tiene confianza, además te ayudara en todo y dará lo que quieras, te pagara ¡muy bien!-La pelinegra enardeció y en un movimiento lo tenía contra la pared, mirandolo fijamente.

-Escúchame bien. Si quiere que trabaje tanto para él que venga y me lo diga a la cara y tu, renacuajo, ten los pantalones suficientes para negarte si no quieres hacerlo, maldita sea, porque crees que jamás he salido contigo.-Badolf se sonrojo, a eso era a lo que se refería cuando decía que Lana comía, se devoraba a los hombres con su lengua larga capaz de cortar cabezas.

-Así que era por eso.

-Y también porque no eres mi tipo. -Se encogió de hombros.-Soy una mujer libre, no quiero perder mi libertad por nada del mundo. Ahora, si me disculpas Bodolf, la esposa, amante o querida de tu tan preciado jefe esta esperando, acompáñala y no metas la pata ¿entendido?.-El hombre asintió mudo, penando en que la proxima vez que la viera, él tendría que acorralarla así e invitarla a salir.

++

Svetlana entró al tocador y se quitó los pupilentes, al fin podía descansar de ellos. Se colocó gafas obscuras y entró por otro lado a una pequeña oficina, donde había dejado su bolso, se quitó las gabardina y se colocó una chamarra negra un tanto más ajustada, despues se quitó la peluca y dejo salir su larga cabellera semi ondulda. Ahora solo tenía que salir de allí.

Oleg hablaba con aquel hombre que había quedado impresionado al ver a su señora. Oleg dio ordenes, simples y muy directas a todos los que cuidaban aquel lugar. Ninguna palabra a sus hijos, no hasta que fuera el momento correcto. Su fiel asintió con la cabeza y salió del lugar sin prensarlo más. Oleg suspiro y sonrió, si, como un idiota ¿Cómo no hacerlo? No esperaba tal sorpresa. Se quedo en silenció y cerro sus ojos. Sonrió. Los escucho con claridad. Svetlana era una fiera, siempre lo fue. Pobre Bodolf, tenía mucha suerte o al menos, se estaba salvando de las garras de un terrible futuro. Se apresuro y salió de aquella oficina. Fue sólo su olfato el que lo guío hasta donde ella. Un pequeño y "Secreto" vestidor. Se recargo en la pared con los brazos cruzados, espero a que la puerta de aquel cuartito se abriera porque hizo lo que ella deseaba.- Te quiero para mi, aquí y no, no aceptare un no por respuesta.- Y se aseguro de interponerse en cualquier punto en el que ella intentara escapar. Era emocionante ¿Qué le recordaba esas acciones? Ah, si. Una vez en la escuela, las consecuencias, dos semanas en detención por "acoso" a una alumna, ella había sido muy cruel con él en esos tiempos.

-(-)-

Danya miro a Bodolf acercándose a ella. Sonrió un poco.- ¿Donde esta el Sr. Yasikov?- Cuestiono con respeto hacía su pareja y mirando con cierta sospecha al chico ¿Por qué no estaba con él?

Se giró, sorprendida metiendo la mano en su bolso, a punto de sacar su arma. Eso no hubiera sido nada bueno.-Que esta haciendo aquí.-Frunció su ceño, la estaba mirando con su cabello largo, ¡joder! su farse, maldita sea la grandiosa idea de cambiarse allí. Sonrió un poco y se acercó a él.-No.-Lo enfatizo y se volvió a girar, para salir de una vez, además él estaba casado, esa propuesta sonaba un poco... cinica. Muy cinica.

++
++

-Esta revisando algunas cosas en la oficina.-Sonrió.-Señorita yo espero poder ser una grata compañia para usted y el bebé.-¿que quiere ver?

-Lo que querías.- Le aclaro, acercándose un paso más a ella. Las pupilas se le habían dilatado. Inhalo profundo porque ella olía delicioso, era su única y su belleza lo noqueaba por completo. Sonrió y la tomo de la muñeca y la giro, arrinconandole contra la pared.- ¿Es qué no escuchaste? HE dicho que no acepto un no por respuesta.-Sonrió encantado de la cercanía.- Y, para que no te quede duda, la Srta. Romanov no es mi esposa ni mucho menos mi amante...- un momento... ahora que lo pensaba, podía considerarla como tal pero, no, no era valido en su caso.- Es sólo la madre de mi hija.- Si, desde que la vio a ella, Danya Romanov dejo de ser su mujer.

-(-)-

-Por supuesto, Badolf.- Claro, no era una mujer desagradable. Le pidió que terminara por darle ese Tour que la mujer poco guió pero mucho le enseño.

Sus ojos lo fulminaron, ¿como se atrevía a arrinconarla? ¿Quien se creía? -Tus problemas maritales arreglalos en casa.-Le levantó la mirada, su barbilla reacia a bajarse ante nadie.-Bodolf tal vez no pudo hacer frente a alguien como tu, pero yo no soy Bodolf y yo no me someto ante nadie. Tu no aceptas un no como respuesta.-Svetlana dio un paso hacia él pegándose por completo.-Mis Noes son absolutos, Yasikov.

++

-Pues aquí tenmos una copia de la mona lisa. No es la original, el museo de Paris, el Louvre no nos ha querido ceder la pieza. Es casi imposible hacerlo.

Y el Yasikov dio un paso más hacía ella. La pego completamente a la pared y se mantuvo pegado a ella por completo.- No lo entiendes preciosa. Temes que todos cuantos trabajan aquí pierdan su trabajo ¿No? Todo dependerá de ti.- Decía, sabiendo que ella entendería. Si tenía que jugar sucio lo haría. La cosa era asegurarse de no perderla de vista.

-(-)-

Danya sonrió ¿Imposible? Sabía que Oleg lo conseguiría pero no dijo nada.- Es hermosa... la había visto antes pero nunca le dedique un poco de tiempo como el de este momento.-

Bastardo, ¡infame bastardo!- No eres nada tonto.-Le dijo, porque ella por supuesto que podría decir "No me importa hijo de puta, todos los que trabajan aquí me tienen sin cuidado" pero sabía que mentía, esas personas aunque no tenía contacto con ellas, sabía tenían familia, hijos... y ella no era nadie para quitarle a su familia, ella jamás lo permitiría.-¿Que es lo que quieres de mi? Hay personas más capaces para hacer el trabajo-Frunció el ceño, estaba agitada, su cercanía la aceleraba, era como dinamita pues pese a estar tranquila en el exterior, sentía que quería follar como nunca. ¿En que pensaba? "Madura Svetlana, ya no tienes 17 años" pensó "Pero sí más de 10 sin tener sexo" Joder!

++
++


-Es bueno saber empieza a dedicarle algo de tiempo, aunque sea minimo, es relajante, en ocasiones tenemos personas que pueden durar horas y horas contemplando la belleza de estas pinturas.

-¿Qué que es lo que quiero?- Sonrió y se inclino quedando muy cerca de su rostro <<Recuerdame, eso es lo que deseo más que nunca y ¿Sabes qué más? Cómo deseo que luches por mi>> pensó divertido y deseando en verdad que lo primero se hiciera realidad en ese instante pero no, no esperaba milagros ta repentinos. Levanto su mano y le tomo la mejilla y mentón para que sus ojos y los de ellas se miraran fijamente.- Seguro que lo sabes mejor que nadie Sv... Lana- YComo deseo besarla en ese momento.- No quiero a nadie más. Eres tu o todos sufrirán las consecuencias, preciosa. Así que, sera mejor que pases a la oficina antes de irte, porque firmaras el contrato ahora mismo y seras toda mía.- Si, directo, como el amo y señor que era, porque era un Yasikov y compraba lo que más quería y ahora, a sabiendas de que se las vería fatal, la quería a ella y haría hasta lo más bajo para mantenerla a su lado. La reconquistaría sabía que lo lograría.

-(-)-

-Cómo tú, Baldoff?... ¿Te gusta mucho todo eso?- Pregunto cuirosa, linda y encantadora. Si, Danya estaba de curiosa con el chico y bueno, tenía que esperar a que Oleg se desocupara.

Se soltó y su mano se estrelló contra su mejilla.-Podras encerrarme Oleg Yasikov...-Sonrió de lado y luego, esa misma mano que lastimo su mejilla, la acaricio y mimo para al final levantarse de puntas y lamer la herida, besandolo allí, donde ella misma había golpeado.-... pero jamás me vas a quitar las alas. Tu contrato, consideralo firmado, señor.-Gruñó esas ultimas palabras, ella se encargaría de hacerla la vida de cuadritos. Lo juraba por la diosa a la que ella, una lycan seguía.

Oleg definitivamente no sabía con quien se había metido. Se giró, caminando con la frente en alto, con el ceño fruncido y con sus pezones dolorosamente erectos, ¿que tenía de atractivos los cínicos como él? no sabía, pero era claro que su tensión sexual, volaba en el aire.

++
++
-Si, es mi pasion y mi vida.-Suspiró y rió un poco, negando con la cabeza.-Lo qu más me gusta es enseñar señorita Romanov. Por eso me alegra tanto que usted este aprendiendo de esto, que sea curiosa. La curiosidad es un paso para la creación.

(Svetlana le pegó T-T a mi me dolioo asdasd (( )

(D:!! Desglaciada, atente a las consecuencias, nadie, ni siquiera tu como su esposa se había atrevido a pegarle a Oleg... bueno, si Svetlana, tu si te lo cacheteabas xDD)

La mira de Oleg apenas se giro a un lado después de aquella bofetada. No lo espero ¡Joder! No lo espero y entonce sólo sonrió, porque esa mujer sabía... ¡Maldita sea! lo sabía muy bien. Lo provocaba y ahora él no pretendía controlarse de ninguna manera. Muy bien, sería una guerra intensa porque antes de que saliera la tomo, la giro, la pego de nuevo a la pared, la tomo con fuerza del mentón con toda su mano y la beso. Si... que ganas tenía de hacerlo y sería un castigo no tan castigo por su atrevido movimiento. Saboreó sus labios como hacía más de 15 años no los había probado y de plus le mordió con cierta fuerza provocando una herida en su labio inferior, cortando el beso para mimarlo y luego larmelo.- Es un gusto hacer negocios contigo, Lana.- Y se aparto de ella para salir de aquel cuartito. Sonrió encantado, sabía que su vida estaba completamente condenada por su esposa, no se lo iba a perdonar

-(-)-

-Entiendo... entonces ¿Me enseñas, Badolf?- Le pidió pues sabía que aun faltaba mucho más que mostrar del gran edificio.

Svetlana abrió los ojos, jadeo y sintió su boca contra la de ella. Dioses, era un beso, un beso de verdad, no los besos que se había dado con otras personas. -....-Gruñó por lo bajo y sus pechos se pegaron a él para luego soltarse, con la herida.-...-Su mirada se afiló, sus pupilas se dilataron. La loba, él la había sacado, incluso sus uñas eran ligeramente más largas, tenía una sensualidad palpable, era el efecto, nadie debía despertar su lado y sin embargo otro lycan podía. Él podía.

-No sabes con quien te enfrents Oleg Yasikov.-Pateó la puerta apenas él salió, limpió su boca y luego de un momento pensando, abrió la peurta y se dirigió al exterior, con su corazón palpitando.

++
+++

-Claro ¿que te gustaría saber? podemos empezar por lo básico, ¿que es el arte? ¿para que sirve el arte? -Sonrió- para no estar tan solos en nuestra vida, para saber que alguien más aparte de nosotros, vivió en el pasado, con los mismos problemas, con los mismos sentimientos.

-Créeme preciosa, lo se mejor que nadie.- Respondió sin voltear a verla y sin detenerse. Regresaría a la oficina.- No lo olvides Lana, el futuro de todos ellos esta en tu decisión.- Le recordó, porque ella podía no regresar pero lo cumpliría y haría de el futuro de todos esos empleados la peor de sus experiencias.

-(-)-

-Si, sería lo mejor para una novata como yo.- Dijo riendo con el chico y lo escucho con claridad.- ¿El arte?... hmmm creo que es algo hermoso,no lo se, hay tantos tipos que... es difícil describir ¿no lo crees?.- Cuestiono y lo escucho con clridad. Quería entenderlo y ser ella quien le daba es tour a Oleg y no la otra mujer.

Svetlana había salido y se había dirigido a la oficina. Miró con algo de repugnancia el contrato y no lo leyó, tan solo lo firmó y dejó el boligrafo en el escritorio.-...-Sonrió de lado, abriendo la puerta y saliendo de nuevo, al aire libre, sintiendo como el viento golpeaba su rostro para enfriarlo, estaba alterada y caliente.

++
++

-Lo és.-Bodolf se giró, Oleg se estaba tardando mucho.-¿Que ha parecido hasta ahora su estancia en Noruega, ¿no es demasiado frío para usted?

Oleg no tuvo necesidad de ir donde la oficina, sabía que su esposa había ido porque podía olerla y podía sentirla. Estaba furiosa, excitada pero enojada, Le encantaba. Regreso junto a Danya y Badolf/Bodolf (xD ya no se) y lo escucho.

-Rusia suele ser más fría.- Dijo él llegando junto a Danya y ella noto el su mejilla la hinchazón del golpe pero no dijo nada, porque Oleg no se lo permitió.
-Creo que es hora de que nos vayamos, Danya. Badolf regresare mañana en la mañana para cerrar del todo el trato, necesito hablar con mi socio más importante pero, sin importar que, cualquier intento de propuesta que quieran darte, yo te daré 5 veces la cantidad de ser necesario.
Si, Esta vez lo hacía por Svetlana, porque ya había firmado un contrato donde no sólo trabajaría para ese museo, había firmado su "condena" junto a él nuevamente.

-Claro señor Yasikov. Señorita Romanov a sido un placer escuchar y tener su compañía-Sonrió.-Los acompaño a la salida. -Bodolf sonrió y caminó con cuidado, ¿donde estaría Lana? Esperaba que no hubiera hecho nada malo.

++
++

Lana por su parte se había quedado ida dentro del auto hasta que lo miró de nuevo, quería arrollarlo con el carro, lanzarlo por los aires, pero cuando lo vio no lo hizo. Sintió por el contrario una corriente de deseo recorrer su espina dorsal, por lo que no dudo en acelerar, barrerse frente a él y pasar a su lado, mirandolo de reojo a traves del vidrio, saliendo a la carretera. Era tarde y ella debía llegar rápido o volvería a perder al famoso coleccionista de dientes de hombres lobo.

-Idiota-Susurró lejos, como odiaba su gusto fatal por los cinicos, por Oleg Yasikov. El cínico numero uno.

Caminaba junto a... bueno, era sólo Danya en ese instante, porque si. Oleg noto la presencia de su amada esposa. Sonrió, no lo oculto, quería molestarlo. Pidió a Danya que se adelantara y ella se obedeció, justo entonces ella paso a su lado. La siguió con la mirada y no hizo más que guiñarle el ojo y susurrar un "Do Svidaniya, moya lyubov'" [Adiós, mi amor], porque ya anhelaba que fuera de mañana, quería verla de nuevo y a solas.

Continuó manejando unos kilometros más, giró y avanzó por una carretera nevada, lejos del museo.

-¿Te encuentras bien?-Le habló el manos libres mientras ella apretaba el volante con fuerza. Se sentía rara, se sentía enojada y a la vez llena de dudas. Los nombres de aquellos hijos de Oleg, Vladimir, Nikolay y Narkissa, sentía que los habia escuchado antes.-¿Svetlana? -Sentía que los labios de ese engreido hombre los había probado antes, ¿pero donde? ¡Donde!-¡Svetlana!

-Lo siento...-Tomó el celular.-¿En donde será el encuentro?-Preguntó ella, colocandose los guantes de piel y saliendo a la intemperie. Era una loba y por ello no tenía frio, no le daba miedo estar sola en una nevada, pelear era lo suyo, sobretodo cuando se trataba de quitar las colecciones a personas que pretendían robarlas o hacer de ellas una problema.

-Vas a enfrentarte contra muchos seres obscuros, ¿estas segura que no quieres refuerzos?-La pelinegra estaba segura, lo tenía todo calculado, ella sola podría, sin embargo no contaba con que estuviera alterada y distraida, ni muchos menos empapada del olor de Oleg, porque sí, Svetlaba se había envuelto en su aroma sin darse cuenta y eso podría genera problemas.

-Estoy segura, dejenme sola, puedo con esto.-Sacó sus armas y miró al frente. Estaba inquieta, muy... inquieta.

++++
++++
++++


Marcó su telefono, ella necesitaba ir con su padre, necesitaba ir con Franko... necesitaba.. necesitaba muchas cosas.

-Nicki, algo no esta bien...-Se llevó la mano a su cuello, justo donde Ashran le había mordido.-Necesito ver a papá, necesito ver a Franko... es mi amigo y siento que algo no va bien.

Oleg suspiro y fue al auto con la Romanov hasta que perdió de vista el auto de su esposa. Tomo asiento y ordeno la retirada.

-¿Sucede algo, Oleg?

-En lo absoluto Danya.- Contesto con simpleza, aun mirando por la ventana ¿Qué era lo que haría su mujer? Le intrigaba.

-¿Iremos a un lugar en especial?- Si, ella quería la atención del Yasikov y la tuvo por un segundo, una sonrisa que lo dijo todo. Oleg no tenía muchas ganas de estar fuera y ella no hizo más que asentir. Siempre seguía la sordenes del Yasikov.

-(-)-

Nokolay por su parte estaba caminando por la ciudad. había regresado a Rusia, después de aquel encuentro con su hermanita y el alemán, decidió despejarse un poco y darle espació a su hermana, si, siempre era así pero era NArkissa y le afectaba mucho verle mal. tenía a ser demasiado sobre protector y sabía que estaba mal porque lla... ella era la viva imagen de su madre.
-Bueno...-Respondió al llamado escuchando a su hermana.- Papá esta en Noruega con Danya... Tranquilizate. Seguro que estan bien ¿Quieres ver a tu amigo? Adelante ¿Qué te lo impide? ¿quieres que te acompañe? ¿Necesitas que te ayude en algo? _ Dispuesto a todo por su preciosa hermana.

Svetlana miró a los seres que se acercaban. Cazadores de lobos.

-Una lobita.-Rió uno de ellos mientras rodeaban el auto de la hermosa mujer.-Que guapa, dime algo pequeña lobita ´¿donde esta tu manada?-Uno de ellos le lanzó una bala de luz que ella pudo esquivar con facilidad.

-No necesito una manada-Gruñó apuntandole con el arma e iniciando una pelea. Ella era rápida, era una lider despues de todo, ella era una guerrera, una Yasikov que no le temía y que por el contrario, era fuerte y entregada a su tierra, a su gente.

-¡Hija de perra!-Svetlana rió, ellos no estaban nada alejados de la verdad. Una explosión se escuchó, habían detonado unas bombas que ella no esperaba.-¡Muerte perra!

La pelinegra saltó por encima del carro y para su horror, vio como una avalancha de nieve empezaba a descender.

++
++

Negó empacando sus cosas, había puesto el manos libres.-Nicky, solo...-suspiró y se dejo caer.-Es solo que no se que haré, estaré sola y Anubis no viene conmigo, pero no te preocupes yo... llamaré a alguien para que me pueda acompañar. -Estaba pensando en Chel, ¿estaría por allí? ella realmente necesitaba aclarar su mente con una mujer, necesitaba los abrazos de una madre pero la suya... estaba muerta.

La pareja llego hasta donde el Hotel. Oleg se sentía un tanto impaciente. Miro hacía el lado contrario a la entrada ¿Svetlana? Sólo esperaba que en verdad ella estuviera bien si no se molestaría mucho ¡Mucho!
Miro a Danya que le llamaba cerca de la entrada del Hotel y entonces camino hacía ella con una sonrisa. Ella tenía a su futura pequeña... eso le hacía sonreir pero... Dabya no se tomaría nada bien la nueva noticia.

-(-)-

-Nark por favor calma. No estas sola, sólo dime donde te encuentro ¿Si? Yo iré contigo.- Le dijo mientras se detenía y daba media vuelta para regresar donde aquel pequeño departamento que había decido rentar por un par de semanas.- O... ¿Ya tienes a alguien en mente?